Escrito por 12:00 am 2017, Agendas locales, MS en Excélsior

Depresión: agenda de riesgo

por Mario Luis Fuentes

    De acuerdo con el INEGI, al menos 34.5 millones de personas en México se han sentido alguna vez deprimidas; de ellas 14.48 millones son hombres y 20.37 millones son mujeres; de ese total, sólo 1.63 millones de personas toman antidepresivos. El propio INEGI documenta que en 2014 y 2015 el número de defunciones por trastornos mentales rebasó los 5 mil casos anuales, de las cuales, más del 50% se debe al consumo de sustancias psicotrópicas.


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El próximo 7 de abril se conmemora el Día Internacional de la Salud, y en este 2017 el tema central de la conmemoración está centrado en la depresión, como un problema de salud pública de alcance mundial. En efecto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que es ya la primera causa de problemas de salud y discapacidad a nivel internacional.

En el sitio electrónico de la OMS se lee: “Según las últimas estimaciones (…) más de 300 millones de personas viven con depresión, un incremento de más del 18% entre 2005 y 2015 (…) En las Américas, cerca de 50 millones de personas vivían con depresión en 2015, alrededor del 5% de la población”.

En México la problemática no es menor. Cada día hay miles de casos diagnosticados, pero también miles que no son atendidos y las personas que le padecen no reciben tratamiento oportuno.

Los datos

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Hogares, 2015, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en ese año había 104.95 millones de personas mayores de 7 años en todo el país; de ellas, 57.2 millones se habían sentido alguna vez preocupadas o nerviosas.

Esta sensación de “nerviosismo o preocupación” la sintieron todos los días un total de 11.58 millones de personas; otros 9.4 millones la sintieron semanalmente; 7.43 millones se sintieron nerviosos o preocupados una vez al mes; mientras que 28.75 millones se sintieron así “algunas veces al año”. En contraste, 47.32 millones declararon “nunca haberse sentido preocupados o nerviosos”.

La intensidad de la sensación mencionada varía. En la categoría de “poco nerviosos o preocupados” se ubicaron 33.4 millones de personas; mientras que en el nivel de “mucho” se ubicaron 10.91 millones.

Del total de personas que declararon alguna vez haberse sentido “preocupadas o nerviosas”, hay un total de 2.98 millones que declaran tomar algún medicamente para el tratamiento de su sensación.

Les afecta más a ellas 

La Encuesta Nacional de Hogares también muestra que hay más mujeres que hombres, que declaran haberse sentido preocupadas o nerviosas. En efecto, entre ellas hay 54.31 millones que tienen 7 años o más; de las cuales, 31.31 millones (57.65% del total), declararon alguno de los estados de preocupación o nerviosismo.

En contraste, entre los hombres hay 50.63 millones mayores de 7 años, entre quienes hubo en el 2015 un total de 25.88 millones (51.11% del total) que declararon haberse sentido preocupados o nerviosos.

Un problema de edades

Aunque la frecuencia de los sentimientos de preocupación o nerviosismo se incrementan con la edad, no deja de sorprender el dato del nivel de incidencia de estos estados mentales entre las poblaciones de adolescentes y jóvenes. En efecto, en el grupo de 7 a 14 años había, de acuerdo con el INEGI, 18.35 millones de niñas, niños y adolescentes; entre ellos, los sentimientos descritos afectaban a 4.48 millones, cifra equivalente al 24.41% en el grupo de edad.

En el grupo de 15 a 29 años, el INEGI contabilizó a 30.75 millones de adolescentes y jóvenes; entre quienes la sensación de preocupación o nerviosismo afectó a un total de 15 millones, dato equivalente al 48.75%. Es decir, una incidencia del doble, respecto del grupo de edad previamente señalado.

En el segmento de edad de los 30 a los 49 años, INEGI estima que la cifra de personas es de 32.11 millones; de las cuales, 21.46 millones sintieron preocupación o nerviosismo, es decir, una cifra equivalente al 66.83% del total.

Para el grupo de 60 a 65 años INEGI estima una suma de 15.17 millones de personas, de las cuales 10.52 millones se ubican en la situación descrita; dato equivalente al 69.34% del total; mientras que para el grupo de personas de 65 años y más INEGI estimó una suma de 8.54 millones de los cuales 5.72 millones se ubicaron en la misma condición, es decir, 67% del total.

Asimismo, el INEGI documentó que 34.85 millones de personas se han sentido deprimidas; de las cuales 14.48 millones eran hombres y 20.37 millones eran mujeres. Asimismo, destaca el hecho que del total de personas que se han sentido deprimidas, únicamente 1.63 millones toman antidepresivos, mientras que 33.19 millones no lo hace.

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En este indicador la diferencia de género es muy relevante, pues entre los hombres, la sensación de “mucha depresión” afectó a 2.095 millones, mientras que la misma intensidad entre las mujeres afectó a un total de 4.95 millones. Asimismo, del total de personas que toman antidepresivos, alrededor de 414 mil son hombres, mientras que 1.22 millones son mujeres.

Consecuencias mortales

De acuerdo con el INEGI, las estadísticas de mortalidad muestran que entre los años 2011 y 2015 fallecieron 23,335 personas por trastornos mentales; es decir, un promedio de 4,667 casos anuales, aunque en los años del 2014 y 2015, las cifras crecieron a 5,378 y 5,327 casos, respectivamente.

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*Columna publicada con el mismo nombre en el periódico Excélsior, 04-abril-2017, p.19.

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