Alerta de género nacional

México tuvo, en 2020, la tasa de homicidios de mujeres más alta en la historia, generando una alerta de género nacional, y por edades, se registró también la tasa más alta de homicidios de niñas y adolescentes. La tasa de feminicidios, igualmente de acuerdo con los datos oficiales, se ha incrementado desde 2015, llegando a los años de 2019 y 2020 a récords históricos de 1.50 y 1.49 víctimas de este cruel delito, por cada 100 mil mujeres en el país. En números absolutos, el promedio nacional es de aproximadamente 11 homicidios de mujeres cada día, de los cuales, tres son reconocidos como feminicidios.

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Nuestro país incorporó, en la Ley General de Acceso a una Vida Libre de Violencia para las mujeres, el mecanismo denominado “Alerta de Género”, el cual busca activar un conjunto de acciones gubernamentales para frenar la violencia feminicida, o la presencia de agravios comparados, que atenten contra la vida y la dignidad de las mujeres en un territorio determinado.

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Hasta la fecha, desde el año 2015, se han declarado 21 alertas de género en distintas entidades y municipios del país; en 10 ocasiones se ha rechazado la declaratoria de alerta de género; y a la fecha hay cinco procedimientos que se encuentran en trámite, de los cuales, tres se encuentran en Amparo.

Según los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, hasta el 31 de julio de en 2021 se tiene registro de 564 probables víctimas de feminicidio (80.5 por mes); pero también hay 432 mujeres procesadas por el “delito de aborto”.

Pero no sólo lo anterior, hay más de 16 mil carpetas de investigación iniciadas por abuso sexual; más de 4 mil por acoso sexual; por hostigamiento sexual más de 1,200; más de 8,800 por violación simple; 3,400 por violación equiparada; más de 150 mil por violencia intrafamiliar; casi 2,500 por violencia de género; 13,330 por incumplimiento de obligaciones de asistencia familiar; casi 8,300 por otros delitos contra la familia; 1,544 por corrupción de menores; y 380 por el delito de trata de personas.

En evidencia, la inmensa mayoría de estos delitos son mujeres, niñas y niños; pero, sobre todo, lo que los datos revelan son una condición generalizada de violencia contra las mujeres. Por lo que no es exagerado plantear que el mecanismo de la alerta de género debería revisarse, en el sentido de pensar que el país vive condiciones que en todo momento amenazan la integridad, la vida y la dignidad de la mayoría de las mujeres. Y que, dadas las condiciones de la emergencia sanitaria y económica, por la cual la mayoría de los empleos y salarios perdidos fueron de mujeres, tal vez sería el momento de plantear una alerta de género nacional.

Debido precisamente a la pandemia y el confinamiento, la movilización de los feminismos en las calles se redujo, respecto de lo que se vio en el año 2019. Pero eso no implica, de ningún modo, que la exigencia de un país de igualdad sustantiva entre mujeres y hombres, y particularmente, de un país de acceso a una vida libre de violencia para toda mujer, se mantiene vigente y cada vez con mayor sentido de la urgencia.

Entre 2017 y 2020, se ha registrado un promedio anual de homicidios de mujeres de 3,757 víctimas, lo que hace una suma de 15,027 mujeres asesinadas en este periodo. Hay que reiterarlo: nunca el país había tenido estos niveles de violencia homicida, a la par de un crecimiento simultáneo de todas las otras violencias, documentadas, pero, sobre todo, aquellas para las que no existen estadísticas ni instrumentos para dimensionarlas en toda su magnitud.

Estamos, pues, ante el reto de la pacificación y la reconciliación; y eso implica mucho más que reducir la violencia armada del crimen organizado; implica cimentar, en cada hogar, en todos los centros escolares, en todo espacio público, una nueva cultura de la igualdad.

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Investigador del PUED-UNAM

Imagen tomada de Flickr del autor: Desing Demon/Diablo