Rumbo al sur del Estado de Campeche, se encuentra uno de los grandes tesoros de México y el mundo. Se trata de Calakmul, una biósfera que, con poco más de setecientas mil hectáreas, ha sido señalada como uno de “los pulmones de la tierra”, y el segundo mayor del continente, solo detrás de la famosa Reserva del Amazonas.
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La Reserva de la Biósfera Calakmul es sin duda de suma importancia ecológica, ya que, acorde a lo reconocido por el gobierno de nuestro país, representa la mayor Reserva mexicana de bosque tropical, con características climatológicas, edafológicas y de vegetación, que incluyen un número considerable de especies consideradas raras o amenazadas, y por ello, como señala también la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales: “por su extensión y ubicación representa una de las pocas posibilidades de conservar poblaciones genéticamente saludables de especies que están amenazadas de extinción en México.”[1]
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Pero Calakmul no solo es valiosa por su Reserva ecológica, pues escondida dentro de esta biósfera, se encuentran también importantes vestigios de los pueblos mayas que antaño se asentaron en el sur de México.
Su nombre significa en maya “Dos Montículos Adyacentes” (Ca dos, Lak adyacentes, Mul montículo artificial o pirámide), pues su nombre hace referencia a las dos grandes estructuras que constituyen el edificio principal de esta zona arqueológica desde donde puede visualizarse la magnificencia de la selva que le rodea. De acuerdo a lo señalado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), la ciudad maya de Calakmul está conformada por una “planeación urbana única” ya que contiene plazas ceremoniales y conjuntos residenciales, presentando un patrón de asentamiento que se adaptó a la geografía de su entorno. Además, es aquí donde se han encontrado el mayor número de estelas mayas y por tanto, el INAH ha concluido también que: “es la ciudad más importante del clásico maya y junto con Tikal y Palenque encabezaban la organización política de las tierras altas”. [2]
Lo anterior, fue la razón por la que en mayo de 1989, fue publicado en el Diario Oficial de la Federación, el Decreto por el que se declaró la Reserva de la biosfera Calakmul y posteriormente, en el año 2002, esta fue nombrada “Patrimonio Cultural de la Humanidad”.
Pero el mayor reconocimiento llegó en el año 2014, cuando “la antigua ciudad maya y bosques tropicales protegidos de Calakmul, en Campeche” fue reconocida como el primer “Patrimonio Mixto (cultural y natural) de la Humanidad” de México, inscrito en la lista de patrimonio mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Sin embargo, este paraíso maya ha sido también protagonista de un interesante caso legal que ha puesto en jaque a la Suprema Corte de la Nación, al Senado de la República y a los Estados que conforman la península de Yucatán, debido al conflicto limítrofe iniciado con motivo de la división de su territorio, el cual se encuentra ubicado en el llamado “vértice trifinio”, donde convergen los Estados de Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
El conflicto inicio cuando en el año de 1996, se publicó el Decreto 244, por el cual se creó en el Estado de Campeche, el municipio de Calakmul, lo que motivó que el Estado de Quintana Roo, interpusiera una primera controversia constitucional en contra del citado Decreto, argumentando que dicho acto le causó una significativa pérdida de su territorio.
El asunto fue conocido en primer término por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, misma que, tras otras controversias y recursos legales, terminó turnando el caso a la Cámara de Senadores, al estimar que en este asunto correspondía a dicha Cámara la facultad de trazar los límites entre Estados. No obstante, ante el paso del tiempo y la falta de resolución de fondo del asunto, el Estado de Quintana Roo determinó en el año 2019, realizar una reforma a su Constitución Estatal mediante la emisión del Decreto 303, por el que resolvió colocar vértices, superficies, medidas y colindancias con las cuales sobrepuso como parte de su territorio, superficies pertenecientes a los Estados de Yucatán y Quintana Roo.
Esta nueva acción provocó la interposición, ahora por parte del Estado de Yucatán, de una nueva controversia constitucional, la 226/2019, que actualmente está siendo sustanciada por nuestra Corte Suprema, por lo que seguimos en espera de la resolución que ponga fin de manera definitiva al conflicto limítrofe y a uno de los procesos legales más importantes e interesantes de los últimos tiempos.
Y aunque el territorio sigue en disputa, al no existir modificación definitiva del territorio, Calakmul sigue siendo reconocido oficialmente por las diversas autoridades federales como parte del territorio del Estado de Campeche. Asimismo, en el año 2016, la Cámara de Diputados aprobó declarar el día 4 de agosto de cada año como el “Día Nacional de Calakmul, Campeche, Primer Patrimonio Mixto de la Humanidad en México.”
Mientras tanto, Calakmul aguarda como el tesoro maya de México, pues adentrarse en él, es descubrir la riqueza de la vida que aquí se cobija y de la historia que celosamente se guarda, y descubrir también la importancia de proteger esta tierra sagrada y ancestral que constituye la extraordinaria dicotomía en la que confluye la herencia de nuestros antepasados y mundo que dejaremos a las generaciones venideras.
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[1] Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales Blog. (2018). La Reserva de la Biósfera Calakmul. agosto 2021, de Gobierno de México Sitio web: https://www.gob.mx/semarnat/articulos/la-reserva-de-la-biosfera-calakmul
[2] Instituto Nacional de Antropología e Historia INAH. (2021). Zona Arqueológica de Calakmul. agosto 2021, de Gobierno de México Sitio web: https://www.inah.gob.mx/zonas/62-zona-arqueologica-de-calakmul
