Según las estadísticas del Observatorio Nacional de Crímenes de Odio, de la Fundación Arcoíris, en lo que va de 2020 se han registrado 35 casos de agresiones a la comunidad LGBTTTIQ+, de los cuales 28 son asesinatos.
Esta cifra ha incrementado desde 2018, ya que ese año se registraron 36 homicidios de personas de esta comunidad, y en 2019 hubo 65 asesinatos. En contraste, para los años 2015, 2016 y 2017 se reportaron 18, 11 y 17 casos de asesinato.
De acuerdo con el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional CEJIL, los crímenes de odio motivados por la orientación sexual se pueden definir como:
“Todo acto doloso, generalmente realizado con saña, que incluye, pero no se limita a: violaciones del derecho a la vida, a la integridad personal, a la libertad personal; el cual tiene la intención de causar daños graves o muerte a la víctima, basando la agresión en el rechazo, intolerancia, desprecio, odio o discriminación hacia un grupo en situación de vulnerabilidad, en este caso siendo este grupo la población LGBTI”.
Frente a la situación en nuestro país, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) exhortó a la Fiscalía General de la República y las Fiscalías Generales de las entidades federativas a “investigar las agresiones, homicidios y feminicidios en razón de orientación sexual e identidad de género con la debida diligencia, transparencia, en apego a la técnica jurídica, y la evidencia jurídica necesarias”.
Actuar con perspectiva de identidad sexo-genérica
La Comisión ha solicitado también que todas las investigaciones se realicen con perspectiva de diversidad sexo-genérica y garantizando en todo momento los derechos humanos de las víctimas.
Solicitó también que “se observe lo establecido en los instrumentos relativos a este tema, entre los que destacan el ‘Protocolo de actuación para el personal de las instancias de procuración de justicia del país en los casos que involucren la Orientación Sexual o la Identidad de Género’ y el ‘Protocolo de actuación para quienes imparten justicia en los casos que involucren la orientación sexual y la identidad de género'”.
Para llevar a cabo las investigaciones sobre estas agresiones y homicidios, la CNDH reitera la importancia de capacitar al personal de investigación, operación y administración para respetar la dignidad de las personas LGBTTTIQ+.
El organismo instó a que las fiscalías trabajen en coordinación con los Congresos federal y locales para incorporar agravantes dentro del apartado de homicidio cuando se cometa por la orientación sexual o identidad de género de las personas.