por Mario Luis Fuentes
La discriminación tiene como resultado directo, la exclusión en el cumplimiento de los derechos de las personas. Por ejemplo, mientras que el promedio nacional de personas en pobreza es de 45.5% de la población total, entre las personas hablantes de lenguas indígenas es de 76.8%; mientras que entre las niñas, niños y adolescentes es de 53.8%. Algo similar ocurre con la vulnerabilidad por carencia de acceso a la alimentación: el promedio nacional es de 23.3%; en contraste, para las personas con algún tipo de discapacidad el indicador asciende a 31.2%; y entre la población rural el indicador es de 30.9%.