El 8 de marzo se conmemora el “Día Internacional de la Mujer”, nombre oficial que le dio la Organización de las Naciones Unidas en 1975. Sin embargo, algunas especialistas en género, feminismo y derechos humanos de las mujeres sugieren hablar en plural y decir “mujeres” ya que no existe una forma única de ser mujer.
Escrito por: Ana Luisa Nerio Monroy
Cada una tiene una historia de vida distinta marcada por su contexto familiar, social, económico, político, y cultural. A las mujeres nos atraviesan distintas características como la edad, la nacionalidad, el origen étnico, la orientación sexual, la situación socioeconómica, entre otras. Hay mujeres mayores, adolescentes, en un matrimonio, solteras, madres, sin hijos o hijas, migrantes, refugiadas, indígenas afrodescendientes, con discapacidad, heterosexuales, lesbianas, transexuales etcétera. En una misma mujer se intersectan[1] diversas características, por lo que existen tantas formas de ser mujer como mujeres en el mundo. Así que es mucho más realista conmemorar el Día Internacional de las Mujeres, así, en plural.
Te invita os a leer: Escuelas de Tiempo Completo
En 1975 la Organización de las Naciones Unidas (ONU), estableció el 8 de marzo como “Día Internacional de la Mujer”. No existe consenso sobre los orígenes exactos de la fecha. La versión más conocida es la de la muerte de más de cien obreras en una fábrica textil en Nueva York, Estados Unidos, en 1908. Las obreras realizaban una huelga para exigir mejoras en sus salarios y una disminución de las jornadas de trabajo. Ante esto, los dueños de la fábrica provocaron el incendio de las instalaciones con las obreras adentro, por lo que muchas de ellas perdieron la vida.
También se ha señalado que fue la feminista-socialista alemana Clara Zetkin, quien propuso celebrar un día internacional de la mujer el 8 de marzo, pero ya antes el movimiento feminista sufragista en Estados Unidos, había propuesto esta conmoración como parte de sus actividades para exigir el derecho al voto, a la educación, a la propiedad y a la patria potestad de sus hijas e hijos.
Asimismo, se ha señalado que al tomar como referencia el incendio de la fábrica de Nueva York y la muerte de las obreras de 1908, se buscaba ocultar el posible origen socialista de la conmemoración ya que, en varios países grupos de mujeres socialistas demandaban derechos laborales y solicitaron realizar actos conmemorativos en fechas cercanas al 8 de marzo. Recordemos que cuando se fija el 8 de marzo como la fecha oficial, el mundo se encontraba bajo la llamada Guerra Fría, periodo donde los proyectos capitalista y socialista se disputaban el liderazgo económico y político mundial.
El 8 de marzo está muy ligado a los derechos laborales de las mujeres. Si bien las sufragistas y su lucha por el derecho al voto, tienen una gran influencia en el origen de esta conmemoración, es sobre todo, la exigencia de las mujeres obreras porque se reconocieran derechos como jornadas de trabajo de 8 horas, días de descanso, vacaciones, salario igual por trabajo igual y participación en las decisiones de los sindicatos, lo que dio el primer impulso a la instauración de esta conmemoración.
La primera mitad del siglo XX estaba marcada por la presencia del pensamiento socialista entre amplios sectores de obreros y obreras en el mundo, sobre todo en Europa y los Estados Unidos donde el feminismo socialista cuestiona la explotación de las mujeres en las fábricas y en sus propios hogares. Con el paso de los años la agenda de la conmemoración del Día Internacional de las Mujeres se ha ampliado y actualmente se visibilizan todos los derechos y se exige acabar con la desigualdad y violencia que las mujeres viven. Sin embargo, no ha dejado de ser importante o central, la reflexión sobre los derechos al trabajo digno y los derechos laborales de las mujeres, dada su trascendencia para lograr autonomía económica y calidad de vida.
Esta no es una fecha de celebración sino de conmemorar. No se celebra el “ser mujer” como no se celebra “ser hombre”. Y esta no es una postura de mujeres resentidas o que odian las flores y los chocolates. El Día Internacional de las Mujeres, desde un enfoque de derechos humanos y género, es un día para reconocer a las mujeres, sus aportes a la vida económica social, cultural y política. También es una fecha para crear conciencia sobre los rezagos y obstáculos que existen para que mujeres y niñas gocen de todos los derechos.
Felicitar a las mujeres, regalarles rosas o chocolates banaliza y despolitiza un movimiento cuyo objetivo es visibilizar las grandes desigualdades entre mujeres y hombres que existen todavía. El 8 de marzo se trata sobre poner en evidencia las limitaciones, obstáculos y discriminación que las mujeres viven para acceder a las mismas oportunidades que los hombres; que existen inequidades estructurales basadas en prejuicios y estereotipos de género que mantienen a millones de mujeres subordinadas, en la pobreza y viviendo violencia.
Sobre el uso del color violeta en esta fecha y en general para los eventos o temas que tienen que ver con el feminismo, derechos de las mujeres y la perspectiva de género, se ubican tres posibles explicaciones. La primera es que el color violeta (y sus variantes como morado y lila) es el resultado de mezclar el rosa y el azul. Como es sabido, en la cultura occidental el color rosa está ligado a la feminidad tradicional y el azul a la masculinidad. Así que la mezcla de estos colores simboliza la unión, el trabajo conjunto, dos fuerzas que caminan hacia un mismo fin: la igualdad y la equidad.
La segunda explicación la encontramos en la historia de las sufragistas inglesas del siglo XIX que solían utilizar alguna prenda, distintivo o accesorio violeta para reconocerse entre ellas. Las telas que elaboraban las obreras asesinadas en el incendio de la fábrica textil de Nueva York, Estados Unidos de Norteamérica, era violeta, otra de las razones (tercera), por las que se dice se usa este color como símbolo del feminismo. Si bien no hay un consenso generalizado, lo cierto es que el violeta es el color del 8 de marzo.
También podría interesarte: Empresas globales, CFE y calidad de vida para los yucatecos
[1] La interseccionalidad es una categoría utilizada por el feminismo y los estudios de género para hablar de las múltiples características que se cruzan o intersectan en cada persona y que la hacen única.
Uno de los ámbitos en los que menos se ha trabajado en nuestro país, en…
Esta semana, la segunda de noviembre, líderes mundiales se reúnen en Bakú - capital y…
Balun Canan, de la magnífica poeta, ensayista, diplomática y novelista, Rosario Castellanos, mujer que sin…
El 14 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Diabetes, una fecha establecida…
Chiapas es uno de los estados más ricos en patrimonio cultural de México. Este territorio,…
¿Cómo enfrentará México el huracán de políticas migratorias y comerciales? La elección de Donald Trump…
Esta web usa cookies.
Ver comentarios
muy interesante