Los reportes cotidianos de casos vinculados a la COVID-19 en México muestran una proporción no despreciable de casos bajo estudio de los que se carece aún de resultado. De hecho, al corte del 7 de junio de 2020 estaban como pendientes de resultado el 13.5% de los casos en estudio, mientras que 34.8% se reportaban como casos positivos confirmados y 51.7% habían dado negativo en la prueba para SARS-Cov-2. En este texto se analiza rápidamente el impacto esperado de los casos sospechosos
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Lo anterior obliga a disponer de dos cifras extremas: un mínimo de 117,103 casos confirmados como positivos, que sabemos de antemano que no es correcto pues deberá incluir los casos positivos que se detecten entre los pendientes de resultados; y un máximo 38.7% más alto, de 162,420 casos, cuando se agregan a los positivos todos los casos sospechosos, aún sabiendo que ello no será así, pues solamente 40.2% de los casos con resultado en pruebas de laboratorio se registran como positivos.
Esta tasa de positividad ha ido variando a través del tiempo, pero es sencillo estimar cuál es la cantidad esperada de casos positivos en el conjunto de casos pendientes de resultado, si se da a cada caso pendiente un valor acorde con la tasa de positividad observada para el día de inicio de síntomas correspondiente al caso.
Los posibles resultados
Este ejercicio nos aporta un valor intermedio entre los dos extremos conocidos de manera sencilla, que sabemos que son equivocados, pues uno subestima y otro sobreestima el total de casos positivos que se tendrá cuando se concluyan las pruebas de todos los casos bajo estudio.
Al efectuar este cálculo con los datos reportados hasta el día 7 de junio de 2020, se obtiene un total de 135,567 casos potencialmente positivos a la fecha, 15.8% más alto que la cantidad confirmada, pero 19.8% más baja que la que resulta de agregar todos los sospechosos como posibles positivos.
Parecia que este número podría ser una buena aproximación al número real de casos positivos que se encontrarán finalmente entre los estudiados.
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Frase clave: El impacto esperado de los casos sospechosos
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