Esta oposición tibia se está desmantelando. Traen una crisis de identidad que la neta da pena.
Varios senadores del PAN el otro día se reunieron con el líder de Vox, el partido español de ultraderecha, como si quisieran meter a otro miembro tóxico a su coalición piñata.
Puedes seguir al autor Fernando Székely Aburto en Twitter @Szekelyaburtoro
Vox es un asco y ya salió la verdad del PAN. Y es justo lo que este país, ahorita, no necesita.
Santiago Abascal, jefe Vox, vino a México a firmar un pacto contra el comunismo. Acá tenemos millones de pobres y la violencia crece diario pero nos preocupa el comunismo aunque ya está más pasado de moda que Pemex.
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Son épocas oscuras para la política mexicana. El presidente negligente ha hecho que la oposición, que ya de por si era débil y no sabía qué trip con nada, pierda el piso y el coco.
Vox y el PAN
Dicen que Cristian Camacho, ex operador de redes sociales de la bancada del PAN en el senado, fue el que convenció a Julen Rementería de reunirse con Abascal.
En Europa, por cierto, invocar al líder de Vox es peor que invocar a Voldemort.
Vino entonces el tipo este y se tomó una foto de esas de anuario con Alejandra Reynoso Sánchez, Lilly Téllez y Roberto Moya, entre otros senadores del PAN y un par del PRI después de firmar su documento.
A las dos horas ya los criticaban por todos lados.
Xóchitl Gálvez les mentó la madre, lo mismo que los bots del presidente.
El PAN tuvo que salir a decir que no se había hecho un acuerdo oficial, que su única alianza política en España es con el PP (partido de derechas cuyos miembros han migrado a Vox últimamente).
Empezó la comedia de errores. Hasta Andrés Manuel se acordó de ellos en la despótica mañanera.
Ahora están más divididos y ya nadie sabe para dónde jalar.
¿Qué es Vox?
Después de 10 años en el conservador PP, Don Santi fundó Vox en 2013; en las elecciones del 2015 y 2016 no lograron nada, pero después de la debacle del PP en 2018 (corrupción, crisis económica, movimientos separatistas) se apoderaron de la derecha.
Desde entonces han seguido creciendo y no se ve cómo frenarlos.
Su ideología es nacionalista, centralista y católica. Se les acusa de antifeministas porque se ponen erizos con el aborto. Los tachan de islamófobos, entre otras cosas, porque se han opuesto a que España reciba refugiados Afganos.
Les obsesiona la historia, que recodifican como les conviene. Celebran un leve el franquismo, dicen que andan en una ‘reconquista’.
Y todo México supo de ellos hace un mes porque dijeron que Hernán Cortés había liberado a nuestros pueblos indígenas y traído la civilización.
Lo que trajo sarampión, eso de civilización es pura fayuca.
Proponen reprimir a los separatistas catalanes. Se niegan a aceptar migrantes del norte de África.
Y dan roña. Y allá cada vez los apoya más banda.
Por qué no hay que jalar para allá en México
Mira, que los españoles se tripeen como quieran. Pero aquí estos ideales de la derecha tóxica nada más van a hacer daño.
Las tendencias políticas mundiales van para el otro lado, para lo más liberal. Acá no necesitamos más odio, más enojo, más exclusión. No necesitamos más elitismo, más poder del gobierno o más miedo.
Urge, eso sí, inclusión, tolerancia, vitalidad, pluralismo, respeto y empatía, puros ideales que ahuitan a los de la derecha extrema.
Lo que los senadores del PAN no se dan cuenta es que juntándose con ese vato nada más le siguieron el juego al presidente. Es exactamente lo que quiere ese men, erizar a la ‘oposición’ para que haga cosas erráticas y así él pueda decir que es mejor.
Así la gente que votó por él piensa que hizo bien.
Lo único que hizo el PAN con la reunión esta fue polarizar más, dividir más a la gente. Hace falta unión mexicana, no que cada uno se alborote con sus propios intereses.
A algunos les hace hervir tanto la sangre el macuspano que se lanzan al lado contrario. Pero esto es una falla de identificación, porque esta mala izquierda que ahora gobierna de forma tan extraña en verdad es derecha pura disfrazada de populismo.
Vox es intransigente, manipula el discurso, tiene una obsesión con la historia reconfigurada (para lavarle el coco a la gente), usa puro discurso violento, perpetúa odios y divisiones, trae ideas retrógradas y le importa todo menos lo que le debería de importar.
Todo eso a mí me recuerda al papá de los hermanos Monreal y de Marcelo Ebrard (AMLO).
Y acá la banda del PAN creyendo que se van al lado opuesto sin darse cuenta de que todos andan en el mismo equipo.
Creen que se le oponen al presidente con estos gestos ridículos pero nada más le hacen el mandado.
Hay que hacer algo contra Morena, sí. Pero no hay que empoderar a cualquier vato retrógrado para lograrlo.
¿A poco para curarte la migraña el doctor te receta que te cortes un dedo?
Cuando la gente está contra las cuerdas te enseña quién es en verdad.
Y acá el PAN, que lleva meses tratando de convencerte de que es el futuro, te acaba de enseñar que no es más que el pasado oscuro.
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