México sigue siendo un país de una población mayoritariamente joven; sin embargo, enfrenta uno de los procesos de envejecimiento demográfico más acelerados en el mundo. Desde esta perspectiva, los retos que nos impone la crisis económica -derivada de la emergencia sanitaria-, agrava los ya de por sí rezagos y carencias que teníamos como país antes de la pandemia.
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Por esta razón, es importante destacar los datos que dio a conocer recientemente el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), relativos a la Encuesta Nacional sobre Salud y Envejecimiento (ENASEM, 2018), en la cual se sintetizan muchos indicadores, capturados en momentos previos a la pandemia, pero que permiten dimensionar la magnitud de los problemas que se les asocian.
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Grandes números
En México había, en 2018, un total de 28.19 millones de personas mayores de 50 años de edad. De ellas, 12.27 millones eran hombres y 15.91 millones eran mujeres. Como puede verse, en estos grupos etarios la sobre mortalidad masculina ha generado una muy significativa diferencia en el peso demográfico que tienen los grupos de mujeres y hombres, sobre todo en el grupo de 50 a 59 años, en el que las mujeres representan al 59.16% del total de personas en ese segmento de edad.
Otro dato a destacar es que, entre las personas mayores de 50 años, la mayoría habita en localidades de menos de 100 mil habitantes, pues de los 28.19 millones que hay e el país, 15.25 millones (54.11%) radica en ese tipo de localidades, mientras que 12.93 millones vive en localidades con más de 100 mil personas (45.89%).
En rezago educativo
De acuerdo con el INEGI, la población de 50 años y más tiene muy bajos niveles de escolaridad: 3.98 millones no han cursado ningún grado de escolaridad formal; 6.9 millones, únicamente de 1 a 5 años de formación; mientras que 6 millones más alcanzan apenas 6 años de escolaridad. Estas cifras representan el 60% de quienes tienen 50 años y más. Asimismo, hay 6.11 millones que alcanzan entre 7 y 9 años de escolaridad, y únicamente 4.9 millones (17.4% del total) tienen estudios superiores a la secundaria.
En el mundo del empleo
Según los datos del INEGI, en el 2018 había 12.9 millones de personas mayores de 50 años que trabajaban; prácticamente 580 mil se encontraban en busca de trabajo; 7.6 millones estaban dedicados al trabajo doméstico no remunerado en el hogar; mientras que únicamente 7.045 millones se encontraba jubilado o pensionado.
Salud precaria
Del total de las personas mayores de 50 años, en el 2018 había solo un 7% que auto reportaba que su salud era muy buena; el 27.8% consideraba que era buena; el 48.85% afirmaba que su salud era “regular”; mientras que el 8.8% pensaba que su salud era mala.
Asimismo, había 3.17 millones de personas que reportaron limitaciones o la imposibilidad para caminar, moverse, bañarse, utilizar el excusado, comer o ir a la cama por sí mismos. Asimismo, el 5.17% reportó tener una “mala memoria” debido a su edad; mientras que el 37.52% declaró síntomas depresivos en la semana previa a la entrevista, es decir, 8.42 millones de personas en el grupo de edad considerado.
Con el envejeciendo en malas condiciones es pertinente añadir que 8.029 millones se “sintieron solos o solas” (35.78%); que en 5.67 millones de casos declararon “no sentir que disfruta la vida”; y en 10.18 millones de casos más, declararon haberse “sentido tristes” en la semana anterior a la encuesta.
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