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Genealogías y disidencias, muestra de una memoria viva y tesoro futuro

Con la exposición Genealogías y disidencias de la colección del Museo Universitario Arte Contemporáneo (MUAC), la UNAM se celebra, en su rol de coleccionista, como depositaria de una variedad de mundos, de una memoria viva y tesoro futuro.

Un Artículo de: Gaceta UNAM

Así lo afirmó la coordinadora de Difusión Cultural de la Universidad, Rosa Beltrán Álvarez, durante la inauguración de la muestra, presidida por el rector Enrique Graue Wiechers; el presidente del Patronato Fondo de Arte Contemporáneo, AC, Arturo Talavera Autrique; la directora general de Artes Visuales del MUAC, Amanda de la Garza Mata, y la curadora Pilar García.

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La exposición que muestra obras del acervo público de arte contemporáneo más importante del país, y de artistas como Clemencia Echeverri, Carlos Aguirre, Germán Venegas y Juan Soriano, entre muchos otros, marca una nueva fase en la que el MUAC tendrá un espacio definido, dedicado a la exhibición constante de su colección reunida a lo largo de sus 15 años de existencia.

Será como “el corazón de la casa, de la memoria, con ideas y objetos… donde los universitarios y los públicos pueden recrearse, reinventarse y regocijarse con las obras de quienes comparten un horizonte histórico y afectivo próximo”, añadió Beltrán Álvarez.

Aseveró que para la Universidad ha sido una prioridad –por lo menos en las últimas dos décadas– ir construyendo una colección de arte moderno y contemporáneo, a fin de crear un acervo y establecer la herencia del presente y el pasado inmediato, ya que en México persiste la retórica de pensar que su cultura está definida por su patrimonio heredado o encontrado.

En el encuentro al que asistieron el presidente de la Junta de Patronos de la UNAM, Mario Luis Fuentes Alcalá, y el patrono Jonathan Davis Arzac, entre otras autoridades universitarias, Amanda de la Garza Mata –directora general de Artes Visuales del MUAC– comentó que la exposición es un proyecto clave en la historia del Museo, pues representa un nuevo modelo de exhibir su colección en sus vertientes artística, documental y de diseño.

Su despliegue está organizado en ejes curatoriales cambiantes que se alejan de una lógica temática para proponer una revisión de conjuntos de obras que reflejan la heterogeneidad del acervo, los vínculos entre ellas; pero también sus divergencias. Estas piezas y archivos, agregó, albergan la historia del arte local, sus genealogías, así como la construcción de la modernidad de México y su ocaso.

La colección del MUAC es también el acervo público de arte contemporáneo más importante del país y un referente respecto al coleccionismo público, fuente de investigación para académicos y estudiantes, la cual nutre de forma constante innumerables exposiciones en México y el extranjero.

De igual forma, Arturo Talavera Autrique expuso que el Patronato Fondo de Arte Contemporáneo ha colaborado para que el MUAC sea punto de referencia a nivel nacional e internacional respecto a las prácticas artísticas en México, a partir del año 1952.

Hoy cuenta con la colección de arte contemporáneo más extensa en el país, con 2,185 obras de más de 300 artistas. Además, el Centro de Documentación Arkheia resguarda 54 fondos y cinco colecciones documentales. “El Museo se esfuerza constantemente en asegurar que no sólo se exhiban las piezas de su colección, sino que también sean objeto de investigación, de enseñanza, aprendizaje y difusión”, aseveró.

La muestra abierta al público desde el 21 de octubre está compuesta de varios núcleos. En La fiesta de las balas, salas 4 y 5, se exhiben obras sobre la violencia como un hecho físico, social y político; un laberinto de representaciones y en las que se describen relaciones de poder, fuerza y la experiencia de los ejecutores.

Cuarto oscuro, sala 6, hace referencia a los lugares de encuentros eróticos, consensuados y rápidos que se celebran en la penumbra para favorecer el anonimato y la desinhibición. Reúne obras de artistas contemporáneos que exploran la experiencia sexual sin sujetarse a la visión estrecha de la moralidad pública, o que postulan el exhibicionismo como una práctica transgresiva o crítica.

Al ras del suelo, terraza norte, muestra una modalidad clave de la escultura y la objetualidad contemporáneas que desafían la escultura con la estatuaria y, por tanto, con la verticalidad.

En El Archivero, sala 4, hay piezas de los artistas Yani Pecanins, Gabriel Macotela y Armando Sáenz, quienes fundaron en 1984 El Archivero, espacio dedicado a la exhibición, difusión y distribución de libros de artista en la colonia Roma de Ciudad de México, y que persiste en la memoria como el colectivo más relevante del libro de artista como género y proyecto.

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