Los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas brindan el mandato internacional y la oportunidad para que los países se centren en objetivos socialmente equitativos para un desarrollo sostenible. Al respecto, existe un reconocimiento creciente de los valores de inclusión y sostenibilidad de la Agenda 2030(#gLOCAL2022). Sin embargo, gestionar las compensaciones reales que se producen cuando los países persiguen un desarrollo inclusivo, no es tarea fácil.
Por ejemplo, la presión para desarrollar energía de combustibles fósiles para impulsar el crecimiento es un caso puntual que entra en conflicto con el control de la contaminación y la minimización de los daños para la salud humana y el cambio climático [1].
Escrito por: Cecilia Liotti
Lo mismo sucede con los sistemas y capacidades de monitoreo y evaluación de la política pública. La búsqueda de un crecimiento sostenible e inclusivo también presenta desafíos para la evaluación. Sería justo decir que las prioridades de evaluación y los métodos no han seguido el ritmo de las necesidades de evaluar los resultados en la sostenibilidad [2]. Por eso, es necesario revalorar los esfuerzos de evaluación en varios niveles, que van desde los sólidos marcos y métodos de análisis para aplicaciones prácticas hasta conclusiones y recomendaciones normativas.
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En ese contexto se inserta la Semana de la Evaluación #gLOCAL2022 con un amplio programa en diferentes regiones del mundo, del 30 de mayo al 3 de junio, que invita a la comunidad dedicada al monitoreo y evaluación (M&E) a abrir diálogo sobre cómo las innovaciones en recopilación, análisis y el uso de datos están influyendo el campo del M&E.
#gLOCAL2022 cubre una agenda para reflexionar cómo las prácticas de monitoreo y evaluación pueden aportar valor agregado como herramientas a la mano de las personas tomadoras de decisiones para impactar en la Agenda 2030, especialmente en un mundo pandémico. #gLOCAL2022 remite inevitablemente a la implementación del M&E en el mundo actual donde “reconstruir mejor” a partir de las crisis requiere fortalecer la capacidad de los gobiernos para recopilar, analizar y utilizar datos en la toma de decisiones, sostiene The Global Evaluation Initiative (GEI) [3].
GEI abordará esta creciente y urgente necesidad de uso oportuno y confiable de evidencia en la toma de decisiones especialmente para observar los países en desarrollo donde los sistemas y las capacidades de M&E siguen siendo débiles.
De acuerdo a CLEAR LAC, la evaluación tiene valor instrumental, simbólico y conceptual: abre el camino a los cambios en los programas de gobierno y en las políticas públicas, legitima o refuta posturas en torno de cómo se conciben las hojas de ruta gubernamentales y da curso a cambios en la comprensión sobre cómo deben diseñarse las políticas públicas [4]. En el fondo del asunto hay una dimensión normativa sobre la planeación gubernamental y su gobernanza. La evaluación, y por lo tanto, el monitoreo de los ODS, le otorga legitimidad y autoridad a las agendas de actuación de los países.
Sin embargo, surge la reiterada pregunta sobre si las instituciones pueden abordar las brechas globales en la capacidad de monitoreo y evaluación, como plantea el Banco Mundial y sobre la necesidad de alcanzar esfuerzos coordinados por parte de amplias coaliciones [5], así como sobre cuatro premisas básicas para la implementación de un sistema de M&E: la aceptación del uso de evidencia para la formulación de políticas y la toma de decisiones; la existencia de un sistema de evaluación eficaz; el lugar que revisten la transparencia y la rendición de cuentas; y un entorno político propicio para lograr esa aceptación.
Un entorno favorable para la evaluación alienta la generación de información imparcial, técnica, estratégica y ciudadana para asegurar que la planificación y el presupuesto nacionales reflejen las necesidades de la gente [6]. La evaluación en ese sentido, proporciona un medio para mejorar la participación de los grupos de la sociedad civil, así como una oportunidad para que las partes interesadas interactúen con las y los miembros de un parlamento y mejoren la consulta y representación. Así, el compromiso de los congresos con la evaluación es cada vez más importante en el contexto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Recordemos que los congresos son los actores responsables de aprobar políticas y leyes, y de priorizar, respaldar o vetar los presupuestos, pero también los parlamentos están en posición de interpelar las agendas de gobierno y cuestionar las disparidades, exclusiones, y procesos de discriminación que afectan a las personas de un país y de aprobar los recursos necesarios para remediar la situación, nuevamente requiriendo acceso a información sólida y completa evidencia para ayudar a la toma de decisiones y servir mejor a los que se quedan atrás, que es la pauta de la Agenda 2030 [7].
#gLOCAL2022 abrirá en breve el foro con “EvalEvolución” como tema general. Aprovechemos, entonces, el diálogo para analizar cómo está cambiando el campo del monitoreo y la evaluación para satisfacer las realidades actuales y las necesidades futuras, y para contribuir al trazado de intervenciones de políticas más relevantes y efectivas. Igualmente, para desarrollar respuestas más justas y oportunas a los problemas públicos, que expuso la pandemia y, en última instancia, para mejorar el progreso hacia los ODS.
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[1]. Vinod Thomas, en el capítulo 1, “Evaluating Sustainable Development”, del documento Evaluation for Agenda 2030. Providing Evidence on Progress and Sustainability del 2017, pone en contexto la importancia de los ODS como mandato internacional, así como los desafíos para gestionar las contradicciones y choques de las agendas nacionales. Recuperado de internet de https://sdgs.un.org/sites/default/files/publications/2455IDEASwebREV_08Dec.pdf
[2]. International Development Evaluation Association (2017). Evaluation for Agenda 2030. Providing Evidence on Progress and Sustainability. Recuperado de internet de https://sdgs.un.org/sites/default/files/publications/2455IDEASwebREV_08Dec.pdf
[3]. The Global Evaluation Initiative (GEI). puede verse aquí
[4] Véase la importancia que reviste una evaluación para CLEAR LAC. Véase especialmente la iniciativa ODS 360, proyecto para la visibilización de la evaluación de los Objetivos del Desarrollo Sostenible en América Latina y el Caribe.
[5] Cita de Alison Evans, World Bank Vice President & Independent Evaluation Group Director-General. Véase The Global Evaluation Initiative (GEI). https://www.globalevaluationinitiative.org/about-gei
[6] Es la posición expuesta por Mallika R. Samaranayake y Asela Kalugampitiya en el capítulo 3, “Evaluation for Improving People’s Lives”, del documento Evaluation for Agenda 2030. Providing Evidence on Progress and Sustainability del 2017 citado más arriba.
[7] Reiteramos en ese párrafo la discusión que abren Mallika R. Samaranayake y Asela Kalugampitiya, referenciada anteriormente.
Frase clave: #gLOCAL2022: la importancia de las capacidades de monitoreo y evaluación para la realización de la Agenda 2030, #gLOCAL2022
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