El Instituto Nacional de Estadística y Geografía dio a conocer los resultados del Censo Nacional de Seguridad Pública Federal. En él se concentra una gran cantidad de información, relativa fundamentalmente al desempeño de la Guardia Nacional, entre la que destacan varios indicadores que requieren ser clarificados pues pareciera que la eficacia de la institución, a pesar de los cuantiosos incrementos en el presupuesto que se le asigna, van a la baja.
Escrito por: Mario Luis Fuentes
Una baja sensible en el número de llamadas
Uno de los indicadores reportados por el INEGI es el relativo al número de llamadas de petición de auxilio a la Guardia Nacional. En efecto, de acuerdo con el INEGI, en el año 2019 hubo 330,827 llamadas a la institución, a través del sistema telefónico 088. En el 2020 hubo 280,700; en el 2021 el número descendió nuevamente a 228.875, mientras que en el 2022 se registraron únicamente 184,807 llamadas. Ese número representa apenas el 55.86% del total registrado cuatro años atrás. En evidencia, es importante conocer las causas de esta disminución.
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De las más de 30 categorías de motivo de llamadas que desglosa la GN, la mayoría de los contactos recibidos son para solicitar información institucional (33,697 llamadas). En segundo lugar, se encuentra el robo de vehículos con 33,536; la Extorsión telefónica, con 27,630; para reportar situaciones carreteras hubo 25.679 casos, para otro tipo de servicios, 18,680; por delitos de internet, 15,889; temas de infracciones, 12,237; para emergencias, 10,77; y para extorsiones consumadas, 2,465 casos.
Cae el número de detenciones
Uno de los supuestos que se esgrimieron para crear a la GN en el 2019 fue que ésta funcionaría como una especie de “macro policía preventiva” con presencia y capacidad de actuación en todo el territorio nacional. En esa lógica, se esperaría una intensa presencia disuasiva, lo que también implicaría un importante número de detenciones en flagrancia o en apoyo y coordinación con otras autoridades.
Pese a lo anterior, los datos del INEGI muestran un sorprendentemente bajo número de detenciones y puestas a disposición de presuntos delincuentes ante las autoridades. En efecto, en el 2022 la GN puso a disposición a únicamente 2,814 personas; de ellas, 152 fueron presentadas ante autoridades de justicia cívica, mientras que 2,662 fueron puestas a disposición del Ministerio Público. Si en la GN hay 57,164 elementos con el rango de “Guardias”, lo anterior significa un promedio de una persona detenida y puesta a disposición por cada 20.3 guardias por año.
De acuerdo con los datos del INEGI, en 2019 las puestas a disposición fueron 9,155; cayeron a 7,419 en 2020; a 7,017 en 2021 y a sólo 2,814. Lo anterior significa que en 2022 la GN realizó 3.25 menos detenciones y puestas a disposición que en el año 2019.
Crecen las deserciones
En 2021 y 2022 la Guardia Nacional tuvo casi el mismo número de ingresos que de egresos de la institución. En efecto, en 2021 ingresaron 19,077 hombres; mientras que en 2022 la suma se redujo a 16,982. Entre las mujeres los ingresos fueron de 4,35 y 3,801 elementos, respectivamente. Frente a ello, los egresos de hombres fueron de 18,366 y 15,912 en los años señalados; y entre las mujeres de 4,079 y 3,750, respectivamente.
Finalmente, las deserciones de hombres fueron de 708 en 2021 y de 1,070 en el 2022; entre las mujeres las cifras fueron de 259 y 51, respectivamente.
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