por Mario Luis Fuentes
Entre las enfermedades de notificación inmediata y de seguimiento convencional, hay varias cuyos casos confirmados rebasan significativamente los del 2016: la malaria, la tuberculosis, la tos ferina, el dengue, el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida, las enfermedades infecciosas intestinales y las respiratorias, son algunas de ellas; esto debería llevar a un incremento urgente en el presupuesto para la salud
La protección de la salud depende, en buena medida, como lo ha evidenciado la Organización Mundial de la Salud, de los llamados “determinantes sociales de la salud”; por ello, considerando la magnitud del desastre generado por los sismos de septiembre, así como los posibles efectos que tendrá el cierre de la temporada de lluvias, es importante redoblar los esfuerzos y destinar mayores recursos para potenciar las capacidades de prevención y atención del sector salud.
A continuación se presentan los datos de la Dirección General de Epidemiología, con fecha de corte a la semana 38 de este año (17 al 23 de septiembre), los cuales permiten dimensionar lo que está ocurriendo con varios padecimientos prevenibles.
Enfermedades de notificación
Hay un conjunto de enfermedades que (de acuerdo con la NOM-017-SSA2-1994 para la vigilancia epidemiológica) son consideradas de notificación inmediata, lo cual implica que: “la notificación o comunicación debe realizarse por la vía más rápida disponible… La notificación o comunicación se recibirá en la representación nacional del Órgano Normativo antes que transcurran 24 horas de que se tenga conocimiento por el notificante”.
Entre éstas destacan particularmente las que son transmitidas por vectores, pues su capacidad de propagación es muy alta, sobre todo en climas calurosos y húmedos, y que pueden llevar a brotes o rebrotes, tal y como está ocurriendo en el estado de Guanajuato, el cual tiene un récord histórico de casos confirmados de dengue.
Debe destacarse que a la semana 38 de este 2017 había un total de 5 mil 473 casos de dengue no grave confirmados, y de éstos, 565 se confirmaron sólo en la semana 38. Es decir, 10.36% del total de casos del año se confirmaron en la última semana reportada. A ello debe agregarse que es justamente en los meses de septiembre a noviembre cuando mayor número de casos se reporta, por lo que es altamente probable que la cifra de 7 mil 735 casos reportada en 2016 se rebase significativamente.
En el caso del dengue con signos de alarma se han reportado mil 228 casos en lo que va del año, de los cuales, 98 se confirmaron en la semana de referencia; es decir, 8% del total anualizado en sólo una semana. Finalmente está el dengue grave, con 227 casos, 17 de ellos (7.5% del total del año) confirmados en la semana 38.
La buena noticia es que la enfermedad por virus de chikungunya y la infección por virus del zika han tenido notables reducciones entre 2016 y 2017, al haber pasado de 493 a 25 casos de chikungunya, y de 3 mil 769 a mil 524 de zika. Los esfuerzos no deben disminuir para así mantener la tendencia.
El peligro de las ITS
Entre las enfermedades de notificación inmediata se encuentra también el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida, del cual hubo 3 mil 412 casos confirmados en 2006, mientras que al cierre de la semana 38 de este año se habían confirmado 3 mil 631, de los cuales, 122 casos lo fueron en la semana de referencia. Considerando el promedio de confirmaciones semanales de este año, la cifra al cierre de diciembre podría llegar a 4 mil 969 casos, es decir, 36% por arriba de lo registrado el año pasado.
Otro de los casos que llama la atención es el síndrome coqueluchoide, el cual está asociado a la tos ferina, del cual se confirmaron mil 527 infecciones hasta la tercera semana de septiembre de este año, frente a las mil 542 de todo 2016, lo que significa que, dada la tendencia, este 2017 podría registrar una cifra 35% mayor. Respecto a la tos ferina se han confirmado 426 casos, por lo que al cierre del año podría llegarse a una cifra de 582 casos, una cifra 5% superior a la del año anterior.
Enfermedades de vigilancia convencional
En esta categoría se encuentran padecimientos como la tuberculosis respiratoria, de la cual se han registrado 12 mil 262 casos este año, cantidad ya similar a la del total de 2016, cuando se confirmaron 12 mil 749 casos. Por la tendencia anualizada, podría llegarse a 16 mil 800 casos este año, cifra 31% superior a la de 2016.
Respecto a las hepatitis virales, se espera que se llegue a una cifra aproximada de 10 mil 059 casos este año, es decir, un dato 21% superior al de 2016, cuando se registraron 8 mil 259.
Asimismo, los casos de paludismo (malaria) ya rebasaron en la semana 38 de 2017 a los registrados en todo 2016: 467 casos frente a 396 del año previo. Esto significa que podría llegarse a 639 casos al finalizar 2017, cifra 61% superior a la del año pasado.
Finalmente se encuentran las infecciones respiratorias agudas y las enfermedades infecciosas intestinales. De las primeras se tiene una confirmación de 17.93 millones de casos hasta la semana 38 de este año, frente a un total de 16.61 millones en 2016. Por la tendencia anual podría llegarse a 24 millones 546 mil 646 de casos confirmados, es decir, 47.7% más que en 2016.
Sobre las enfermedades infecciosas intestinales, en este año se han confirmado 4 millones 673 mil 113 casos, frente a los 3 millones 714 mil 273 contabilizados en 2016. Igualmente, por la tendencia anual, podría llegarse a 6 millones 394 mil 786 casos, es decir, 72% más de lo registrado el año pasado.
*Columna publicada con el mismo nombre en el periódico Excélsior, 10-octubre-2017, p.17.