En los últimos años, el debate sobre la reducción de la jornada laboral en México ha cobrado relevancia. La propuesta de reforma para establecer una jornada de 40 horas semanales (en lugar de las actuales 48) ha sido presentada como una medida para mejorar la calidad de vida de las y los trabajadores, y alinearse con estándares internacionales.
Escribe: Guillermo Ramírez Rentería
Sin embargo, a pesar del respaldo de algunos sectores laborales y de múltiples estudios que señalan sus beneficios, la reforma se encuentra estancada y enfrenta resistencia por parte de grupos empresariales, actores políticos y sindicatos a modo. En este articulo solo nos ocuparemos de los dos primeros.
¿Por qué es necesaria la reducción de la jornada laboral?
México es el país con las jornadas laborales más largas de la OCDE. Según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el promedio de horas trabajadas de los países miembros es de 1742 al año. El trabajador mexicano promedio labora 2,207 horas, muy por encima de países como Alemania (1,343 horas), Reino Unido (1524) o Países Bajos (1,413 horas). México también está por arriba de países latinoamericanos como Chile (1953) y Costa Rica (2,171). Aquí se puede observar cómo los países de la OECD que más horas trabajan son latinoamericanos y los que menos lo hacen, son europeos y escandinavos. Sin embargo, esta carga de trabajo no se traduce en una mayor productividad ni en mejores condiciones económicas (OECD, 2023).
El estudio de la semana de 4 días realizado por el Profesor Brendan Burchell de la Universidad de Cambridge ha arrojado resultados interesantes. La semana de 4 días usualmente consta de entre 32 y 40 horas semanales dependiendo del país y la empresa. En Reino Unido se realizó el estudio más grande hasta ahora, donde participaron 61 empresas que implementaron una semana de 4 días, de las cuales 18 declararon que ahora es una política permanente. Entre los resultados encontrados están que en 39% de los empleados, disminuyó el nivel de estrés, 71% sufrió menos síndrome Burnout y hubo una disminución general de ansiedad, fatiga crónica y problemas de sueño (Adam Gasson, 2023). Además, 60% de los empleados combinó de mejor manera su trabajo con responsabilidades de cuidado en el hogar.
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Diversos estudios han demostrado que reducir las horas laborales puede incrementar la productividad, mejorar la salud física y mental de los trabajadores y fortalecer el equilibrio entre la vida personal y profesional. Países como Alemania han implementado jornadas reducidas con buenos resultados en términos de eficiencia y bienestar social (4 Day Week Global, 2024b). El movimiento semana global de 4 días o “4-day week global”, ha mostrado que esta implementación conlleva 25% más utilidades para las empresas, 32% menos renuncias de trabajadores, un aumento de 83% en la atracción de talento, 66% menos de Burnout y 94% de las empresas dejan esta semana como política permanente (4 Day Week Global, 2024a). Entonces, si la evidencia favorece la reducción de la jornada laboral, ¿por qué no avanza la reforma en México?
Los obstáculos a la reforma: el poder empresarial y la falta de voluntad política
A pesar de que la reforma ha sido bien recibida por trabajadores y algunos legisladores, su avance se ha visto bloqueado por el sector empresarial y por la falta de interés del gobierno federal para impulsarla con decisión.
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1. La resistencia del sector empresarial
Uno de los principales argumentos de los empresarios es que reducir la jornada laboral sin afectar los salarios generaría costos adicionales que muchas empresas, especialmente las pequeñas y medianas, no podrían afrontar (Víctor Hugo Durán, 2024). También advierten que la medida podría provocar una disminución en la generación de empleos o incluso despidos.
Sin embargo, esta postura omite que en varios países la transición a jornadas más cortas se ha realizado de manera gradual, permitiendo que las empresas se adapten sin impactos drásticos. Además, diversos estudios han mostrado que una reducción de jornada puede compensarse con un aumento en la productividad y una reducción del ausentismo laboral.
2. Falta de apoyo y ambigüedad del gobierno
A pesar de que la reducción de la jornada laboral ha sido impulsada desde la Cámara de Diputados, el gobierno federal ha mostrado una postura ambigua. Mientras que en otros temas laborales, como el aumento del salario mínimo y la regulación del outsourcing, ha habido un impulso firme, en el caso de la jornada de 40 horas la postura ha sido más moderada (Israel Aguilar Esquivel, 2025).
La presidenta Claudia Sheinbaum ha expresado que es una propuesta legítima, y que este año se debe realizar su discusión y aprobación legislativa con una aplicación gradual. Sin embargo, hasta el momento no hay fechas definidas al respecto.
Los costos de no reducir la jornada laboral
El estancamiento de la reforma de las 40 horas no solo mantiene a México en desventaja frente a otros países en términos de derechos laborales, sino que también perpetúa problemas estructurales en el mercado de trabajo:
1. Baja productividad. Las largas jornadas no han llevado a un incremento en la eficiencia del trabajo; al contrario, México sigue teniendo niveles de productividad bajos en comparación con otros países de la OECD, demostrando que esta no es la solución.
2. Deterioro de la salud mental y física. Jornadas extenuantes aumentan los niveles de estrés, ansiedad y fatiga crónica, lo que a largo plazo afecta la calidad de vida y genera mayores costos en salud pública.
3. Desigualdad social. Quienes más sufren los efectos de la jornada extendida son los trabajadores de sectores con menos protección laboral, como el comercio, la manufactura y el sector informal quienes usualmente deben recorrer grandes distancias de su casa al lugar de trabajo.
Como conclusión, se puede afirmar que la reducción de la jornada laboral en México es una reforma necesaria para mejorar las condiciones de vida de las y los trabajadores y fortalecer la productividad del país. Mientras que en Europa ya se discute una semana de 4 días con cargas laborales de entre 30 y 40 horas, en México la disminución de 48 horas semanales aun enfrenta grandes obstáculos.
Mientras la reforma siga estancada, millones de trabajadores seguirán enfrentando largas jornadas sin ver mejoras en su calidad de vida. La pregunta clave es: ¿hasta cuándo México seguirá postergando un derecho laboral que en otros países ya es una realidad?
Bibliografía
4 Day Week Global. (2024a). 4 Day Week Trial Results. https://www.4dayweek.com
4 Day Week Global. (2024b). The 4-Day-Week in Germany. Universitat Munster. https://www.4dayweek.com/germany-2024-mid-trial-report-form
Adam Gasson. (Julio 2023). A four-day working week improves mental and physical health. UK Research and Innovation. https://www.ukri.org/who-we-are/how-we-are-doing/research-outcomes-and-impact/esrc/a-four-day-working-week-improves-mental-and-physical-health/
Israel Aguilar Esquivel. (Enero 2025). Qué se sabe sobre la aprobación de la reforma para reducir la jornada laboral a 40 horas. infobae. https://www.infobae.com/mexico/2025/01/27/que-se-sabe-sobre-la-aprobacion-de-la-reforma-para-reducir-la-jornada-laboral-a-40-horas/
OECD. (2023). Horas Trabajadas. Organisation for Economic Co-operation and Development. https://www.oecd.org/en/data/indicators/hours-worked.html
Víctor Hugo Durán. (Noviembre 2024). Coparmex pide la postergación a reformas como la jornada laboral y el alza a aguinaldos. Milenio. https://www.milenio.com/negocios/coparmex-pide-postergar-reforma-jornada-laboral-pago-aguinaldos
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