por Ismael Aguilar / José de Jesús Salazar
Una mirada más cercana a las realidades de las ciudades mexicanas comúnmente consideradas competitivas, como Monterrey y su zona metropolitana, muestra claroscuros y contrastes entre la modernidad y el atraso. De no atenderse, estos rezagos terminarán por afectar al proceso mismo de generación de riqueza, y al final de la propia competitividad de la ciudad