La obesidad en las mujeres adultas representa un grave problema de salud pública en México. Según los datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua 2023 (ENSANUT 2023), más de la mitad de las mujeres mexicanas adultas padecen de sobrepeso u obesidad. Este fenómeno no solo tiene implicaciones físicas, como el desarrollo de enfermedades crónicas, sino también sociales y económicas. A lo largo de este artículo se analizarán los resultados más relevantes de la ENSANUT Continua 2023, así como los Anuarios de Morbilidad de la Secretaría de Salud, los cuales evidencian la relación de la obesidad con otros fenómenos de salud pública, como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares. Además, se hará un análisis detallado de las variables que inciden en esta problemática a través de modelos de regresión.
México social/Saúl Arellano
Prevalencia de obesidad en mujeres adultas según ENSANUT 2023
De acuerdo con los resultados preliminares de la ENSANUT 2023, 77.2% de las mujeres mayores de 20 años presentan algún grado de exceso de peso, con un 43.4% clasificadas como obesas (Instituto Nacional de Salud Pública [INSP], 2023). Estas cifras han mostrado un incremento en comparación con ediciones previas, como la de 2018, en la cual la prevalencia de obesidad en mujeres era del 40.2% (INSP, 2018). El mayor aumento se ha observado en mujeres jóvenes de entre 20 y 29 años, grupo en el que el porcentaje de obesidad ha crecido más del 10% en los últimos cinco años.
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Factores asociados a la obesidad en mujeres
El análisis de los datos de la ENSANUT 2023 revela que los principales factores asociados a la obesidad en mujeres adultas incluyen el nivel socioeconómico, la falta de actividad física y el consumo elevado de alimentos ultraprocesados. Más del 50% de las mujeres encuestadas reportaron no realizar la cantidad recomendada de actividad física diaria. Además, se ha detectado una correlación entre la obesidad y factores emocionales y psicológicos, como el estrés y la ansiedad, que afectan de manera desproporcionada a las mujeres.
En el plano socioeconómico, las mujeres que viven en zonas urbanas y con menor nivel de ingresos presentan tasas más altas de obesidad en comparación con las mujeres de zonas rurales. Según Gómez (2020), “la obesidad está íntimamente ligada a la desigualdad económica, ya que las mujeres en situación de pobreza tienen menos acceso a alimentos saludables y espacios para la actividad física”.
Enfermedades crónicas asociadas a la obesidad femenina
Los Anuarios de Morbilidad de la Secretaría de Salud confirman que la obesidad en mujeres adultas está fuertemente relacionada con un aumento en la prevalencia de enfermedades crónicas, especialmente la diabetes tipo 2, hipertensión y enfermedades cardiovasculares. En 2021, se registraron más de 180,000 nuevos casos de diabetes tipo 2 en mujeres, un aumento significativo en comparación con los 150,000 casos reportados en 2015 (Secretaría de Salud, 2021). Además, las enfermedades del corazón, otra comorbilidad común asociada a la obesidad, son la principal causa de muerte en mujeres mexicanas.
La obesidad también está vinculada al desarrollo de ciertos tipos de cáncer, como el de mama y el de endometrio. Según estudios recientes, las mujeres con obesidad tienen un 30% mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama en comparación con aquellas que tienen un peso saludable (Martínez, 2022).
Comparación con ediciones anteriores de ENSANUT
Al comparar los resultados de la ENSANUT 2023 con los de ediciones previas, se puede observar un incremento continuo en la prevalencia de obesidad en mujeres. En 2012, el 37.5% de las mujeres adultas padecía obesidad, una cifra que ha ido aumentando progresivamente hasta alcanzar el 43.4% en 2023 (INSP, 2012). Este aumento se ha atribuido en parte a los cambios en los hábitos de vida, como el mayor consumo de alimentos ultraprocesados y una menor actividad física, así como a factores estructurales relacionados con la pobreza y la falta de acceso a servicios de salud preventivos.
Análisis mediante modelos de regresión
Para entender mejor las variables que influyen en la obesidad femenina, se puede aplicar un modelo de regresión logística, donde la variable dependiente es la obesidad (clasificada como 1 si la mujer es obesa y 0 si no lo es). Entre las variables independientes se incluirían el nivel de ingresos, el nivel de educación, la actividad física, la ingesta de alimentos ultra procesados, la presencia de estrés y la condición socioeconómica.
Un modelo básico de regresión logística muestra que las mujeres con ingresos más bajos tienen una probabilidad 2.5 veces mayor de ser obesas en comparación con aquellas de ingresos altos (Gómez, 2020). Del mismo modo, las mujeres que reportan niveles altos de estrés tienen una probabilidad 1.8 veces mayor de padecer obesidad en comparación con las mujeres con menor estrés.
Correlación con otros fenómenos de salud pública
La obesidad femenina en México no es un fenómeno aislado, sino que se correlaciona con otros problemas de salud pública, como el aumento de las tasas de depresión y ansiedad. Según la ENSANUT 2023, las mujeres obesas tienen el doble de probabilidades de experimentar problemas de salud mental en comparación con aquellas con un peso saludable. Esta correlación refuerza la importancia de abordar la obesidad desde un enfoque integral, que incluya tanto la salud física como mental.
Otro fenómeno importante relacionado con la obesidad es el embarazo. La ENSANUT 2023 indica que las mujeres que han tenido más de un hijo tienen un mayor riesgo de desarrollar obesidad, especialmente si el intervalo entre embarazos es corto (INSP, 2023). Este dato es relevante para la planificación de programas de salud reproductiva y prevención de la obesidad.
Comentarios finales
La obesidad en mujeres adultas en México ha alcanzado proporciones epidémicas, con graves implicaciones para la salud pública. Los datos de la ENSANUT Continua 2023 y los Anuarios de Morbilidad revelan que esta problemática está vinculada a una serie de factores sociales, económicos y emocionales que deben ser abordados mediante políticas públicas integrales. Además, el uso de modelos de regresión permite identificar los factores más relevantes en el desarrollo de la obesidad, lo que puede guiar la creación de intervenciones más efectivas.
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Referencias
Gómez, M. (2020). Obesidad y desigualdad en México: Un análisis multidimensional. Fondo de Cultura Económica.
Instituto Nacional de Salud Pública (INSP). (2012). Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012. Recuperado de [https://ensanut.insp.mx](https://ensanut.insp.mx)
Instituto Nacional de Salud Pública (INSP). (2023). Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua 2023. Recuperado de [https://ensanut.insp.mx](https://ensanut.insp.mx)
Martínez, L. (2022). La obesidad femenina y el riesgo de cáncer: Un enfoque desde la epidemiología. Editorial Porrúa.
Secretaría de Salud. (2021). Anuario de Morbilidad 2021. Recuperado de [https://www.gob.mx/salud](https://www.gob.mx/salud)