Las organizaciones sociales son agentes de cambio capaces de crear soluciones sostenibles y dar respuesta a las necesidades de las poblaciones vulnerables de un país. En México, se han consolidado como actores fundamentales que cumplen un papel clave dentro de los procesos de cohesión social, la construcción de ciudadanía y el fortalecimiento de la democracia.
Escrito por: Alexandro Méndez González
Estas Organizaciones sociales contribuyen a mejorar las condiciones de vida de grupos en pobreza y vulnerabilidad, al construir e implementar proyectos capaces de tener un impacto positivo en las personas y sus comunidades. Así, participan activamente en la atención de las demandas sociales y coadyuvan en la configuración de un modelo de desarrollo con inclusión social a nivel local, estatal, nacional y regional.
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La solidaridad y la comunión entre las organizaciones de la sociedad civil y los gobiernos son cualidades indispensables para avanzar en la solución de los grandes problemas del país, como el rezago educativo, donde es indispensable garantizar una educación de calidad que brinde mejores espacios educativos para la niñez y la juventud mexicanas de escasos recursos. En el contexto de la pandemia y las afectaciones al sistema educativo y en la economía nacional, esto se ha vuelto mucho más urgente.
En las estimaciones de la medición multidimensional de la pobreza elaborados por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y publicados en agosto de 2021, el organismo reportó que el rezago educativo incrementó 0.3 puntos porcentuales entre 2018 y 2020, al pasar de 19% a 19.2% entre un año y otro. Además, Coneval informó que la población nacional de entre 3 y 21 años que no asistía a la escuela ni contaba con el nivel de estudios que comprende la educación obligatoria (preescolar, primaria y secundaria) aumentó también 1.1 puntos porcentuales de 2018 a 2020, al pasar de 15.6% a 16.7%.
Asimismo, con base en datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO) dio a conocer que, derivado de la crisis de la pandemia de COVID-19, al menos 628 mil niños y jóvenes mexicanos tuvieron que interrumpir sus estudios. También reportó que la pandemia causó un rezago de dos años de escolaridad en el país, pues el promedio de aprendizajes era equivalente al tercer año de secundaria y actualmente equivale al primer grado de secundaria, de acuerdo con estimaciones del Banco Mundial.
El rezago educativo aumenta la desigualdad de oportunidades y reduce la movilidad intergeneracional, lo que disminuye la posibilidad de acceder a mejores ingresos laborales. Con la crisis económica derivada de la pandemia, los sectores en mayor marginación fueron los más afectados. Según cifras de la Encuesta para la Medición del Impacto COVID-19 en la Educación (ECOVID-ED), realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la cifra de estudiantes de entre 3 y 29 años que no continuaron sus estudios en el ciclo escolar 2020-2021 fue de 5.2 millones de estudiantes, 2.3 millones de ellos por motivos relacionados con el COVID-19 y 2.9 millones por falta de recursos económicos.
En este sentido, destaca la labor que realiza desde 1997 Fundación Azteca, organización encargada de desarrollar la responsabilidad social de Grupo Salinas, la cual ha implementado acciones sociales en diversos ámbitos, como la educación, el cuidado del medio ambiente y la promoción de la cultura. En materia educativa, Fundación Azteca ha convertido en realidad los sueños de decenas de miles de jóvenes mexicanos que tienen un alto rendimiento escolar, pero se encuentran en una situación socioeconómica desfavorable, al permitirles acceder a una preparación académica de primer nivel.
La educación que se brinda en los Planteles Azteca garantiza de manera gratuita a los jóvenes de excelencia la continuidad de sus estudios y les proporciona las herramientas necesarias para su aprendizaje a través de un modelo educativo que fomenta su creatividad, su imaginación y la promoción de valores. De esta forma, se coadyuva en la formación de nuevas generaciones de ciudadanos íntegros y altamente competitivos. Actualmente, el Sistema Educativo Azteca tiene sedes en Ciudad de México, León, Puebla, Hidalgo, Tlaxcala, Estado de México y Yucatán, donde ha contado con la participación activa y el apoyo de los gobiernos locales, que han sido clave para el desarrollo exitoso del proyecto.
Los programas de Fundación Azteca se han implementado con excelentes resultados gracias a la sinergia que se ha logrado con el sector público y la ciudadanía. Además, el Sistema Educativo Azteca identifica a los estudiantes más destacados y con alto rendimiento escolar de instituciones públicas para brindarles una formación integral con herramientas y sesiones formativas que contribuyen a potenciar sus habilidades y convertirlos en agentes de cambio capaces de incidir en el desarrollo del país en ámbitos como el científico, cultural, económico, político y social.
Este sistema educativo está enfocado en el desarrollo de las competencias de los estudiantes en temas como la robótica, el conocimiento de tecnologías digitales o el aprendizaje avanzado del idioma inglés. La organización impulsa las capacidades de los jóvenes al brindarles una educación de calidad basada en valores, mediante un aprendizaje con enfoque constructivista, autorregulado, contextual y colaborativo.
El proyecto ha generado un impacto muy positivo en la juventud. Este año, por ejemplo, la gira de la campaña Vive sin Drogas llegó al Plantel Azteca Hidalgo y se convirtió en el evento de prevención de adicciones más grande del país, donde más de 500 jóvenes se reunieron para conocer los testimonios de vida y las historias de superación en favor de una vida saludable. Esta exitosa campaña de TV Azteca cumplirá en mayo 24 años de incidir de forma positiva en la juventud, mediante la información sobre los riesgos del consumo de drogas y la promoción de valores familiares.
A todo ello se suma también el triunfo del pasado 12 de marzo del equipo Aztech, conformado por estudiantes del Plantel Azteca CDMX, el cual ganó el premio Chairman’s Award y representará por primera vez al país en la competencia internacional de robótica FIRST, patrocinada por la compañía estadounidense de tecnología móvil Qualcomm.
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La participación de las organizaciones sociales en la política social del país es fundamental para el desarrollo y el bienestar de la población. Es importante conocer y promover su labor, la cual, desde cada ámbito, converge en una de las grandes metas no solo de México, sino a nivel mundial: construir un mejor futuro para las nuevas generaciones.
Alexandro Méndez es doctor en Administración Pública por la Universidad Anáhuac del Norte y profesor de asignatura en la maestría en Administración Pública de la Universidad Tecnológica de México y de la Universidad Autónoma de Durango.
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