Entre 2003 y 2016 seis entidades (Ciudad de México, Estado de México, Nuevo León, Jalisco, Campeche y Veracruz) concentraron en promedio 49.7% del total del conjunto de bienes y servicios que produjeron los estados. El primer lugar lo ocupó la Ciudad de México, con 17.1%
De acuerdo con datos del INEGI, en el periodo señalado, el producto interno bruto estatal incrementó 2.4% en promedio. Quintana Roo y Querétaro se posicionaron como las entidades con mayor incremento, con 4.8% para ambos; seguidas de Aguascalientes y Baja California Sur, con 4.6% y 4.5%, respectivamente. Los menores crecimientos los registraron Tlaxcala (1.4%), Chiapas (1.2%) y Campeche, con una contracción de 4.1%.
Desagregado por actividad económica, el sector terciario a nivel nacional incrementó en promedio 3.1% durante el periodo mencionado. Por su parte, el sector primario creció únicamente 1.8% y el secundario, 1.4%. Campeche encabezó la lista de crecimiento para el sector primario, con un 5.1% (alentado por un incremento extraordinario que se observó en 2014, de 13.2%), mientras que en Chiapas, la Ciudad de México y Nuevo León, la actividad primaria se contrajo entre 0.7% y 1.8%.
El sector secundario creció a un ritmo promedio de 6.4% en Nayarit y de 5.8% para el estado de Zacatecas y Aguascalientes, mientras que Morelos, Tlaxcala y la Ciudad de México presentaron para este sector un crecimiento inferior a 1% y decrecimientos de 1.1% y de 4.7% para Chiapas y Campeche, respectivamente.
El crecimiento del sector terciario lo lideraron los estados de Quintana Roo y Querétaro, donde el promedio para el mismo periodo fue similar al incremento de su producto interno bruto estatal de 4.8%, mientras que en Morelos y Oaxaca fue de 2%, en tanto que Guerrero presentó la peor cifra, con 1.8%.
Los datos del CONAPO y del INEGI revelaron que el PIB per cápita incrementó 1.2% a nivel nacional. Aguascalientes, Querétaro, Ciudad de México, Guanajuato y Zacatecas mostraron incrementos cercanos a 3%, en tanto que en Tlaxcala, Chiapas y Campeche este indicador se contrajo 0.1%, 0.2% y 5.7%, respectivamente.
Es importante señalar que el incremento de la población en cada entidad no está directamente relacionado con las variaciones del producto per cápita; por ejemplo: Querétaro y Aguascalientes, dos de las entidades con mayor crecimiento de PIB por habitante, ocuparon el lugar 8 y 11 en el promedio de crecimiento poblacional de 2003 a 2016, con 1.6% y 1.7%, respectivamente.
Estas cifras indican que el desarrollo se concentró únicamente en los estados que tienen un sector terciario que crece constantemente, y evidencia la necesidad de implementar políticas de desarrollo integral a fin evitar fuertes rezagos sociales como los existentes en Guerrero, Oaxaca y Chiapas, así como disminuir la caída del producto interno bruto de Campeche, ocurrida a lo largo de todo el período.