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La pobreza en Oaxaca 2016 a 2022

La descripción del comportamiento de la pobreza y pobreza extrema multidimensional en las cuatro macro regiones identificadas por Ángel Bassols, publicada en esta misma revista en julio del presente año, mostró que la mayoría de ellas presentaron las mismas tendencias que en el país entre los años 2016 y 2022: experimentaron una marcada elevación en 2020 a raíz de la crisis sanitaria provocada por la COVID 19, y una fuerte contracción entre los años 2020 y 2022.

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Sin embargo, no todas las macro regiones tuvieron la misma evolución de la pobreza multidimensional, de hecho, la región sur, a diferencia de las tres restantes que exhiben las mismas variaciones que la medición nacional, registró una caída tendencial que inició en el año 2016, a pesar del paro económico y social del año 2020, y se extendió hasta el año 2022.

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El comportamiento divergente de la pobreza de la macro región sur se debió a que los tres estados que la componen disminuyeron sus prevalencias en el año de la pandemia, en circunstancias que en el resto del país aumentó. Pero, Oaxaca tiene la peculiaridad, en relación con Guerrero y Chiapas. que la reducción inició en 2016 y se ha sostenido hasta 2022. Dicha peculiaridad ha impulsado analizar el comportamiento de la pobreza en Oaxaca en el período que nos ocupa.

Gráfica 1

Fuente: Construida con datos del CONEVAL

En Oaxaca la pobreza ha disminuido en 9.6 puntos porcentuales (p.p.) entre 2016 y 2022 que equivale a 177 mil personas menos en esta condición, y la pobreza multidimensional extrema se abatió en 4.1 p.p. lo que significó 90 mil personas menos en pobreza extrema en 2022 que en 2016.

Como se sabe, desde el punto de vista conceptual la pobreza multidimensional es la resultante de la consideración simultánea de las carencias en los ámbitos del bienestar y de los derechos sociales. En el plano empírico se define, en general, como la carencia de recursos económicos (ingreso) para satisfacer las necesidades cuya satisfacción estaría garantizada por el valor de una canasta de bienes y servicios (pobreza por ingreso) o por el costo de una canasta alimentaria (pobreza extrema por ingreso). En el ámbito de los derechos sociales la medición considera a la población: en rezago educativo, carencia por acceso a los servicios de salud, carencia por acceso a la seguridad social, carencia por calidad y espacios de la vivienda, carencias por accesos básico en la vivienda y carencia por acceso a la alimentación nutritiva y de calidad.

En Oaxaca la pobreza y la pobreza extrema por ingreso se han reducido, sin pausa, desde 2016 (Gráfica 2).

Gráfica 2

Fuente: Construida con datos del CONEVAL

La pobreza por ingresos disminuyó sistemáticamente a lo largo del período, cayó entre los años extremos en 8.6 p.p. que equivale a casi 130,000 personas menos. A su vez, la pobreza monetaria extrema se redujo paulatinamente en el período 2016 a 2022 de modo que ecayó en 8.2 p.p. o poco menos de 240,000 personas.

La disminución sistemática de la pobreza y pobreza extrema por ingreso entre 2016 y 2022 significa que la capacidad adquisitiva del ingreso de los oaxaqueños se elevó constantemente a pesar de los años de pandemia. Considerando que las líneas de pobreza y pobreza extrema se aplican por igual a todas la entidades federativas, algo particular debe ocurrir con los ingresos de los hogares oaxaqueños que los hizo inmunes a la paralización de actividades económicas en 2020, año de la pandemia.

Los ingresos de los habitantes de Oaxaca, al igual que los del resto de las regiones del país crecieron por el aumento en las remuneraciones del trabajo impulsadas por el alza de los salarios mínimos, ya sea por efecto “faro”, o a través de la mayor demanda en el mercado de bienes y servicios por productos del sector informal. Sin embargo, las transferencias de los programas sociales del gobierno que operaron normalmente en épocas de COVID y las remesas del exterior, deberían haber jugado un rol más importante en los lugares en que hay más pobreza y en que una mayor proporción de la población migró fuera del país. Si bien al nivel nacional es menor el rol jugado por los recursos de los programas sociales y las remesas (Cortés, Nájera y Valdés, 2022; Cortés y Valdés 2024), calibrar su papel en los estados sería motivo suficiente para iniciar investigaciones subnacionales.  

La estructura económica es otro factor que podría incidir en la relativa inmunidad económica de Oaxaca al SARS-COV2. Las actividades rurales y las desarrolladas en localidades pequeñas, experimentaron tasas más bajas de contagio (Nájera, Cortés y Vargas, 2023) y por tanto las consecuencias económicas fueron más matizadas.

Estas consideraciones son hipótesis de trabajo que podrían ser útiles para emprender investigaciones que permitan explicar el hecho de porqué la crisis económica y sanitaria iniciada en 2020 no se expresó, en la región sur en general y en Oaxaca en particular, en un aumento de la pobreza.

La información referida al ámbito de los derechos sociales, medidos a través de las carencias, muestra un panorama diferente al de la economía. En efecto muestra otra cara de la crisis provocada por el COVID. El promedio de carencias en la población en pobreza y pobreza extrema multidimensional de Oaxaca, creció sistemáticamente con la crisis, contrarrestando parcialmente los avances de los ingresos de su población. En 2018 el promedio de carencias en la población en pobreza extrema era de 3.7 y se elevó a 3.9 y 4.0 en 2020 y 2022, respectivamente. En tanto los correspondientes promedios en la población en pobreza multidimensional fueron de 2.9, 3.1 y 3.3 respectivamente (Ver gráfica 3).

Si bien en Oaxaca hubo una mejoría de los ingresos que sacó a un contingente importante de personas de la pobreza monetaria al mismo tiempo se observó un aumento en las carencias. Debe notarse que la disminución de la pobreza por ingreso no necesariamente se refleja en la caída de la pobreza multidimensional, pues si no va acompañada por la eliminación de las carencias alimenta a la categoría de vulnerables por carencias: para que una persona no sea clasificada como pobre debe tener un ingreso mayor que el valor de la canasta completa y no tener carencias sociales. Ahora bien, el aumento en los ingresos y las carencias en Oaxaca se tradujo en un crecimiento de la población vulnerable por carencias de casi 2.0 p.p. (información tomada de la base de datos del CONEVAL) entre 2018 y 2020. La carencia que tuvo el alza más significativa fue la de salud que pasó de 16.3 por ciento en 2018, a 36.9 en 2020, y 65.7 en 2022 (información tomada de la base de dato de CONEVAL).

Gráfica 3

Fuente: Construida con datos del CONEVAL

Por último, el análisis presentado en este texto tuvo especial cuidado en respetar la naturaleza de la información de que se dispone. En efecto, hay que tener especial cuidado en que la encuesta que recaba la información para el cálculo de la pobreza (Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares) no es panel, esto quiere decir que no entrega información para una misma observación a lo largo del tiempo, de modo que por su propia naturaleza no permite saber si una persona calificada en situación de pobreza en 2018 se mantuvo en esa condición en 2020 o bien se movió a alguna de las otras categorías de pobreza: vulnerable por carencias, vulnerable por ingresos, no pobre ni vulnerable. Esta consideración viene al caso porque con la información disponible respecto al comportamiento de la pobreza por ingreso y las carencias, no es posible seguir la pista de las personas que salieron de la condición de pobres, ni saber a qué otras categorías se movieron: no se puede investigar si solucionaron las carencias que tenían y por tanto pasaron a alimentar la categoría de personas no pobres ni vulnerables. Tampoco se podría saber si las personas que ya no son pobres por ingreso estaban cerca de la línea de pobreza de modo que una pequeña ayuda monetaria les permitió saltar la línea sin que ello se tradujera en modificaciones en las carencias.

En síntesis, hay que ser cuidadosos en la interpretación de los datos, en general, y de los datos de pobreza en particular, para evitar conclusiones erróneas.

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Referencias

Cortés F., y S. Valdés (2022), “Pronóstico y resultados de la medición de pobreza2020 en México” Economía UNAM, Núm. 56, Mayo/Agosto, 2022.

Cortés F. y S. Valdés (2024), “La pobreza y la pandemia en México. Nuevos datos” Economía UNAM, Núm. 62, Mayo/Agosto, 2024.

H. Nájera, Cortés F. y D. Vargas (2023), “Un año de contagio municipal por el SARS-CoV-2 en México: análisis jerárquico-espacial bayesiano”, en “Estudios Sociológicos” Vol. 41. 2023.

CONEVAL, Anexo estadístico 2022 (coneval.org.mx).

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