Properzia di Rossi, escultora del renacimiento

El Renacimiento fue todo un movimiento cultural que surgió en Europa en los siglos XV y XVI. Atrás quedaba la Edad Media con su Teocentrismo poniendo a Dios como centro de todo. Ahora, con éste nuevo periodo comenzaba la Edad Moderna, dando fruto a las ideas del humanismo que otorgaban una nueva concepción del hombre y su relación con el mundo. De hecho, el término “Renacimiento” hace alusión al “renacer” de los valores de la antigüedad clásica: Grecia y Roma. En este contexto, aparece la figura de Properzia di Rossi.

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El arte del Renacimiento tuvo su origen en Italia en pleno siglo XV, y allí la arquitectura, escultura y pintura buscaron un arte nuevo. Poco a poco se fueron propagando estas nuevas ideas, dotándolas de un nuevo enfoque y con una gran carga estética e idealista. Así surgió el humanismo el cual se sostuvo bajo una lógica racionalista con un potente optimismo hacia el conocimiento y la consciencia del hombre. Es en esta época cuando se hacen grandes descubrimientos como la imprenta, el descubrimiento de América, hasta la redondez de la Tierra. La idea del hombre se erige como la medida de todas las cosas.

El Renacimiento: el contexto de Properzia di Rossi

Artistas como Leonardo da Vinci, El Greco, Alberto Durero, Sandro Botticelli, Tiziano, Miguel Ángel, Jan van Eyck, son importantes referentes del periodo Renacentista. Sin embargo, podríamos preguntarnos si las mujeres obtuvieron ventaja de éstas grandes ideas humanistas, pero lo cierto es que no. Como nos comenta Ángeles Caso: “la mujer siguió ocupando mayoritariamente su tradicional situación de sombra, elevada en el mejor de los casos al nivel de espejo y reflejo del poder o la sabiduría masculina. Las viejas ideas sobre la inferioridad natural del sexo femenino seguían dominando la mayor parte de las corrientes de pensamiento y de comportamiento moral, refrendadas por las ideas cristianas sobre la condición pecadora y por lo tanto temible de las hijas de Eva”. (Caso, 2011)

Grandes pensadores de la época como Francois Rabelais, fray Martín de Córdova, Erasmo de Rotterdam, Juan Luis Vives, Baltasar de Castiglione, por mencionar algunos, vertieron su concepción sobre el papel femenino y su intelecto. No obstante, es innegable que las mujeres de ese periodo se vieron sometidas a la voluntad de los hombres. Por supuesto, las que tuvieron mejor oportunidad fueron sin duda todas aquellas hijas de artistas o de intelectuales; el camino se vislumbraba mucho más fácil por la educación recibida. Desde luego que sí hubo mujeres sabias, cultas, empapadas del fulgurante humanismo, que figuraron a través de sus escritos, y que lucharon por ser respetadas al igual que los hombres.

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Properzia di Rossi (1490- 1530)

Nace en Florencia, que por aquella época era una ciudad cuna del renacimiento donde justamente nació la noción del arte occidental, sobre todo en los siglos XV y XVI fue impulsada por la rica y despiadada dinastía de los Médici. Fue una gran escultora, de las primeras mujeres artistas, que inclusive esculpió mujeres desnudas (expresando el arte femenino) a manera de alegorías mitológicas.

El arquitecto Giorgio Vasari, considerado uno de los primeros críticos de arte, incluyó la biografía de Rossi en su gran libro “Las vidas de los más excelentes pintores, escultores y arquitectos”; ella fue una de las aproximadamente treinta mujeres que también aparecen en su obra. Vasari empleó el bajorrelieve de Properzia como ejemplo de cómo las mujeres, incluso las más talentosas, no eran capaces de huir de su “naturaleza femenina”.

A Properzia le tocó vivir en una época difícil. Para empezar, la escultura era un arte viril, pues el martillo y el cincel son herramientas arquetípicas masculinas. Y romper paradigmas no era tan fácil en ese contexto cuando la virtud, la modestia y la obediencia eran las máximas cualidades exigidas a una mujer.

Recordemos que en ese entonces las mujeres respetables no podían salir a las plazas así porque sí, pues las calles, la vía pública estaban ajenas a ellas y debían mantener el “decoro”. La fuente creativa estaba más destinada a trabajar en la tapicería y la costura. No se sabe cómo ella logró superar tantas barreras, lo que sí se sabe es que Di Rossi, llegó a tener un importante reconocimiento en su momento, pero tras su muerte su nombre quedó en el olvido histórico, como tantas otras, no siendo hasta el siglo XX cuando la investigación feminista la rescató del olvido.

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Sus trabajos

Hizo hermosas esculturas en miniatura, en las que daba forma tallando con delicadeza y talento retratos y escenas en los huesos de melocotones o albaricoques. Aquel increíble dominio de la técnica le sirvió para lograr otros encargos más importantes como relieves y esculturas de bulto redondo realizadas en mármol. Asimismo, en 1524 cuando tenía 34 años, Properzia entró a una competición para convertirse en el grupo selecto de escultores que trabajarían en la Basílica de San Petronio, la iglesia principal de Bolonia. ¡Y ganó! Recibió el encargo de realizar parte de la decoración del altar mayor de la iglesia de Santa María del Baraccano, y posteriormente la creación de varias esculturas para ornamentar parte de otra iglesia de la ciudad, con un relieve en el que se representaba la escena bíblica de José y la esposa de Putifar.

Lamentablemente, la brillante y prometedora carrera de Properzia se vio truncada antes de tiempo. Su éxito despertó celos de los artistas masculinos, que empezaron a difamarla y hablar sobre su reputación, sintió el rechazo social. Por lo tanto, de Rossi se retiró de las obras públicas, y pronto se vio sumida en la pobreza. Sin dinero y abandonada por todos, murió en 1530, cuando tenía tan sólo 40 años, falleció en el Ospedalle della Morte de Bolonia.

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Para concluir

Esto nos hace reflexionar que es lo que ocurre cuando se rompen paradigmas, y la sociedad llega a ser cruel. ¿Alguna vez hemos sentido rechazo por parte de un grupo? ¿Consideras que en México no hay rechazo social? Según datos de la Encuesta Nacional sobre Discriminación (ENADIS) 2017, que presentó el INEGI, CONAPRED y la UNAM, rebeló que uno de cada cinco mexicanos mayores de 18 años fue discriminado: por la forma de vestir o el arreglo personal acumuló 30% de los casos, con lo que se colocó como el principal motivo de discriminación en el país, seguido del peso o estatura, con 29.1%; las creencias religiosas, con 29.1%, y la edad, con 26.4%.

En lo laboral ¿consideras que existe el rechazo y la discriminación? ¿Tenemos en cuenta que eso significa que hombres y mujeres tengan las mismas oportunidades, beneficios y desarrollo? ¿gana más salario un hombre que una mujer? ¿Cres que aún seguimos teniendo esas visiones estereotipadas de género que atribuye a las mujeres determinadas competencias, como son el cuidado, el buen trato con las personas, la meticulosidad y la limpieza; y a los varones la fuerza física o el manejo de herramientas, maquinaria y tecnología?