El 25 de junio de 2012 se publicó la Ley para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas. Esta ley tiene por objeto garantizar la vida, integridad, libertad y seguridad de las personas que se encuentran en riesgo debido a su actividad en la defensa y promoción de los derechos humanos y en el ejercicio del periodismo.
Por mandato de esta ley, ese mismo año se instaló el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras y Periodistas con la finalidad de subsanar la falta de coordinación entre autoridades estatales y federales en la protección de estos colectivos. Su origen, se halla, sin duda, en la crisis de derechos humanos que se vive en nuestro país y que se ha agravado con el incremento de la violencia.
En efecto, Reporteros sin Fronteras documentó que entre 2012 y 2018 se cometieron 102 asesinatos de periodistas en territorio mexicano, nueve de ellos solo en 2018. Asimismo, el año pasado cerró con un total de 47 asesinatos cometidos en contra de personas defensoras de derechos humanos, muchas de ellas, estaban bajo la protección del mecanismo.
Al respecto, destaca que de acuerdo con la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos «las medidas de protección que ofrece el Mecanismo son insuficientes», además de que «adolece de serias carencias en cuanto a niveles adecuados de personal y presupuesto».
Frente a este panorama, es vital que el actual gobierno federal revierta la tendencia en el aumento del riesgo que enfrentan estos colectivos. Para ello, es urgente que se inicie una discusión seria entorno a la eficacia del Mecanismo. Además de impulsar todas las medidas necesarias para la completa protección de estos actores que son fundamentales para un Estado democrático y de derecho.
Estreno: martes 16 de abril a las 22 h por Canal Once.
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