por Adela Cortina
Hace 40 años se produjo en España una transición ética y no sólo política. El código moral único del nacional-catolicismo quedaba derogado y distintas voces se preguntaban si no iba a existir una ética común a todos los españoles, si a partir de entonces en el mundo moral “todo estaría permitido”, por decirlo con Iván Karamazov.