por Mario Luis Fuentes
De acuerdo con los datos del INEGI, entre 2009 y 2012 el número anual de homicidios creció en 500% en la entidad; y según los datos del tercer Informe de Gobierno del Ejecutivo Federal, desde 2011 y hasta el 2015 se registra un retroceso constante en la tasa de mortalidad infantil; además de que entre 2010 y 2014 se incrementaron significativamente los porcentajes de rezago educativo y vulnerabilidad por carencia alimentaria en la entidad
Tamaulipas es una de las entidades que en mayor medida enfrentan una crisis constante, de seguridad y también de retrocesos sociales relevantes. Se trata de una entidad en la cual hay regiones realmente asoladas por la presencia del crimen organizado, y en la cual se han presentado constantemente eventos de los llamados “narco-bloqueos”, atentados en contra de las autoridades públicas y también homicidios políticos. La elección del próximo 5 de junio se llevará a cabo bajo la sospecha de la injerencia del crimen organizado, y en un clima de incertidumbre que evidentemente, es deseable que pueda revertirse en el corto plazo.
Creció la pobreza
De acuerdo con el Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), la pobreza en Tamaulipas disminuyó ligeramente en términos relativos, pero tal reducción es tan pequeña, que debido al crecimiento demográfico, en el 2014 había más personas pobres que en el año 2010.
En efecto, de acuerdo con la Medición Multidimensional de la Pobreza, en el primer año referido, el 39% de la población tamaulipeca fue considerada como pobre; en el año 2012 el porcentaje se ubicó en 38.4%; mientras que en el año 2014 el porcentaje estimado fue de 37.9%; es decir, en cuatro años, la reducción acumulada fue de 1.1 puntos porcentuales, o bien un promedio anual de .275 puntos porcentuales; por lo que a este ritmo tendrían que pasar aproximadamente 130 años para abatir completamente la pobreza en la entidad.
En números absolutos, de acuerdo con el propio CONEVAL, el número de personas en condición de pobreza creció de 1.30 millones en el año 2010, a 1.315 millones en el 2012; y a 1.33 millones en el 2014; es decir, 29 mil pobres más en cuatro años, o bien un promedio anual de 7,250 personas pobres adicionales.
Empeoró el rezago educativo
Uno de los temas inexplicables en el estado de Tamaulipas es el retroceso que se presentó entre 2010 y 2014 respecto del rezago educativo, es decir, el porcentaje y número de personas que, teniendo más de 15 años no han concluido la educación básica.
En ese sentido es importante destacar que el CONEVAL estimó en 14.4% la proporción de personas en rezago educativo; en 2012 el indicador creció a 15.5%; mientras que en el 2014 el dato se ubicó en 16%; esto implica un crecimiento en números absolutos de 479,700 personas en rezago educativo en el 2010, a 531,100 en el 2012; y de 560 mil en el 2014.
Un importante problema alimentario
De manera también inexplicable, de la mano del crecimiento en el porcentaje y número de personas en pobreza y en rezago educativo, en Tamaulipas creció de manera muy importante el porcentaje y número de personas en vulnerabilidad por carencia de acceso a la alimentación.
De acuerdo con los datos del CONEVAL, en el 2010 el porcentaje de tamaulipecos en la vulnerabilidad señalada fue de 13.6%; en el 2010 el dato creció a 19.2%; mientras que en el 2014 tuvo un incremento adicional a 19.5%; en números absolutos, esto implica un crecimiento de 479,700 personas que había en 2010, a 531,100 en el 2012 y a 560,000 en el año 2014.
Mortalidad infantil: a paso de cangrejo
De acuerdo con el Anexo Estadístico del Tercer Informe de Gobierno del Ejecutivo Federal, en 2015, en Tamaulipas, la tasa de mortalidad infantil se ubicó en 15.2 decesos de menores de un año, por cada mil nacidos vivos. Este indicador se ha ido deteriorando desde el 2011, año a partir del cual, de manera ininterrumpida, ha crecido en la entidad.
Una terrible violencia
Tamaulipas es una entidad en la que la violencia homicida ha sido históricamente elevada, pero que a partir de la llamada “guerra contra el narcotráfico” se recrudeció severamente. En efecto, de acuerdo con las Estadísticas de Mortalidad del INEGI, en el periodo que va de 1990 a 2008, el promedio de defunciones anuales por homicidio en la entidad fue de 288 casos.
En el 2009, año en que inició la presente administración, el número de homicidios ascendió a 315 casos; en el 2010 se ubicó en 963 casos; es decir, un crecimiento de casi 300% en sólo un año; en el 2010 creció a 1,097 casos; llegando a su récord histórico en el 2012, año en que se contabilizaron 1,557 homicidios en la entidad; esta cifra representó un incremento de 500% respecto del 2009.
Al igual que en el resto del país, la violencia homicida comenzó a descender, de tal forma que en el año 2013 se ubicó en 882 casos; en el 2014 tuvo un nuevo repunte, llegando a 910 homicidios; mientras que en el 2015 se contabilizaron 445 casos; cifra notablemente menor a la registrada en años anteriores, pero aún 42% superior a la registrada en el año 2009.
En términos relativos, con una población equivalente al 2.8% del total nacional, en los últimos 6 años Tamaulipas aportó prácticamente el 4% de los homicidios que se cometieron en todo el territorio nacional.
*Columna publicada con el mismo nombre en el periódico Excélsior, 24-Mayo- 2016, p.12
