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Trayectoria de los casos de tuberculosis en México (2018-2024)

La tuberculosis (TB) es una de las enfermedades infecciosas más persistentes en México y el mundo. A pesar de los avances en la medicina y las campañas de salud pública, sigue representando un reto considerable para los sistemas de salud. Este artículo analiza la trayectoria de los casos de tuberculosis reportados en México desde el 2018 hasta la semana 36 del 2024, utilizando como principales fuentes el Boletín Epidemiológico y los Anuarios de Morbilidad de la Secretaría de Salud.

México social/Saúl Arellano

Contexto Epidemiológico de la Tuberculosis en México

Entre 2018 y 2024, los casos de tuberculosis en México han presentado variaciones considerables debido a diversos factores, como cambios en la cobertura de los servicios de salud, la pandemia de COVID-19, y los esfuerzos de detección y tratamiento.

Los datos revelan que en 2018 se registraron 25,000 casos, que disminuyeron ligeramente en los años siguientes, alcanzando 23,800 casos en 2020. El impacto de la pandemia del COVID-19 pudo haber influido en la baja reportada en los diagnósticos, ya que los recursos de salud se concentraron en combatir el coronavirus y las restricciones de movilidad complicaron el acceso a servicios médicos. En 2021, la tendencia mostró un incremento con 24,200 casos reportados, y en 2022 se observó un nuevo aumento del 2.48%. Sin embargo, en 2024 (hasta la semana 36), los casos cayeron de manera significativa, con 19,500 casos reportados.

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Análisis de las Variaciones Porcentuales Anuales

De este modo, se encuentra que entre 2018 y 2020 hay una disminución continuada en el número de casos, alcanzando una reducción del 2.86% en 2020. Posteriormente, entre 2021 y 2022, se registra un leve aumento en los casos, seguido de una disminución importante en 2024; esto puede deberse a dos principales motivos: posiblemente por cambios en los esquemas de tratamiento o políticas públicas más agresivas de contención de la enfermedad; o bien, por un subregistro o déficit de actualización de los datos reportados por el sistema de vigilancia epidemiológica del país.

Recomendaciones de la OMS y OPS

La OMS y la OPS han emitido diversas recomendaciones para el control de la tuberculosis, con un enfoque integral que incluye la prevención, el diagnóstico temprano y el tratamiento efectivo. Entre las principales recomendaciones están:

Vacunación BCG: La OMS continúa recomendando la vacunación con Bacillus Calmette-Guérin (BCG) en países con alta carga de tuberculosis, como México, para prevenir formas graves de la enfermedad, especialmente en niños.

Detección y Diagnóstico Temprano: La detección temprana mediante pruebas de diagnóstico de calidad es crucial. La OPS promueve el uso de tecnologías modernas como la prueba de amplificación de ácidos nucleicos (NAAT) para mejorar el diagnóstico rápido y preciso de TB.

Tratamiento con Régimenes Acortados: En el tratamiento de la tuberculosis, se ha recomendado el uso de regímenes acortados con medicamentos como rifampicina, isoniazida, pirazinamida y etambutol para garantizar la adherencia y disminuir la resistencia a los medicamentos.

Fortalecimiento de los Sistemas de Salud: La OMS enfatiza la necesidad de fortalecer los sistemas de salud para garantizar el acceso universal al diagnóstico y tratamiento, eliminando las barreras económicas y sociales que limitan el acceso a servicios de salud para poblaciones vulnerables.

Vigilancia y Monitoreo: Un sistema robusto de vigilancia epidemiológica es esencial para monitorear la incidencia y evolución de la TB, así como para evaluar el impacto de las estrategias de control de la enfermedad.

Estados con Mayor Incidencia de Tuberculosis en México

Históricamente, los estados con mayores tasas de incidencia de tuberculosis en México han sido aquellos con una combinación de factores de pobreza, particularmente pobreza urbana, hacinamiento y limitada cobertura de servicios de salud. De acuerdo con los datos más recientes:

Baja California y Chiapas se mantienen entre los estados con mayor número de casos debido a sus características demográficas y socioeconómicas.

Sonora y Sinaloa también presentan altas tasas de incidencia, influenciadas por la migración y las condiciones de vida en ciertas zonas urbanas.

Ciudad de México, con su alta densidad poblacional, también sigue siendo un foco importante de casos de tuberculosis.

La trayectoria de la tuberculosis en México entre 2018 y 2024 ha mostrado variaciones significativas influenciadas por factores tanto internos como externos, como la pandemia de COVID-19 y las políticas de salud pública. Aunque ha habido progresos en el control de la enfermedad, sigue siendo un desafío persistente, especialmente en los estados con mayores tasas de incidencia. La adopción de las recomendaciones de la OMS y la OPS, como el fortalecimiento de los sistemas de salud y la implementación de mejores diagnósticos y tratamientos, es esencial para lograr su erradicación en el futuro cercano.

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