La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) dio a conocer a través de su Gaceta los principales avances y logros de la institución durante 2019. Entre ellos, se encuentran las acciones que sus autoridades y el Consejo Universitario han llevado a cabo para prevenir y combatir la violencia de género en sus instalaciones.
Imagen: https://igualdaddegenero.unam.mx/
Una de las acciones más importantes contra la violencia de género fue la anunciada por el rector Enrique Graue durante su discurso de toma de posesión de su segundo periodo en el cargo (2019-2023), al proponer la creación de un órgano independiente de la administración central a través del cual se promuevan estrategias y políticas que garanticen la seguridad y la equidad de las mujeres en sus planteles.
Además, la institución ha anunciado que está trabajando en dar una atención diferenciada y especializada a los casos de violencia de género, y para ello se ha fortalecido la Unidad para la Atención de Denuncias (UNAD). Asimismo, la UNAM afirma estar trabajando en “una propuesta de reforma a la Defensoría de Derechos Universitarios que coadyuve en la política de prevención y atención”.
Consulta también el boletín: “LA UNAM DA RESPUESTA A DEMANDAS Y PROPUESTAS EN MATERIA DE GÉNERO”
Violencia de género universitaria: las denuncias
Las mujeres universitarias están alzando la voz contra la violencia de género. Como señala la doctora Mónica González Contró en su artículo “De intrusas a protagonistas: el camino del Protocolo para Atención de casos de Violencia de Género”, publicado en el Protocolo para la Atención de Casos de Violencia de Género en la UNAM:
Aunque la problemática no es nueva, creo que sí han variado la toma de conciencia sobre lo que no es permisible y la manera en que las mujeres, de forma individual y colectiva, se han decidido a denunciar. En este entorno se inscribe la puesta en marcha del Protocolo para la Atención de los Casos de Violencia de Género de la UNAM, en el contexto de la adhesión a la Plataforma HeForShe de ONU Mujeres en agosto de 2016.
Por ello la relevancia de este Protocolo es mayor, y, tal como lo afirma el rector Graue en la presentación de dicho documento: “a más de tres años de su implementación , es necesario seguir analizando sus resultados y evaluar los alcances obtenidos. El protocolo ha abierto una puerta nueva para reflexionar sobre las oportunidades que tenemos para mejorar y fortalecer esta deuda pendiente y, de ser necesario, replantear las estrategias que nos ayuden a garantizar un ambiente libre de la violencia para las mujeres”.
En este sentido, destaca que de 2016 al 31 de octubre de 2019, se presentaron en la UNAD y en las oficinas jurídicas de los planteles de la Universidad, 1,104 quejas de universitarios sobre violencia de género, contra 991 presuntos agresores.
Las sanciones
Como resultado, en 862 casos se iniciaron procedimientos de sanción, de los cuales 553 se resolvieron y 528 se sancionaron. Otros 168 quedaron sin sancionar y 141 continúan pendientes.
Entre las consecuencias de estos procedimientos, se encuentra que 177 alumnos fueron expulsados, suspendidos o amonestados, así como a 173 miembros del personal académico: a 50 personas se les rescindió el contrato, 74 fueron suspendidas y 49 fueron amonestadas.
La Universidad también rescindió el contrato de 29 trabajadores administrativos, suspendió a 51 y amonestó a otros 23. Además, sancionó a 15 trabajadores de confianza.
Compromisos universitarios
En este contexto, la UNAM se ha comprometido también a fortalecer la representación de mujeres en el Tribunal Universitario, así como a elaborar diagnósticos, evaluaciones e informes sobre las acciones de prevención, atención y erradicación de este tipo de violencia.
La institución se ha mostrado abierta a recibir la colaboración de todas las personas que estén interesadas en mejorar las políticas institucionales. Para ello, ha convocado a grupos de trabajo en los cuales se puedan construir las propuestas que coadyuven a lograr los objetivos universitarios en la materia.
